Para mantener vivas las tradiciones gastronómicas mexicanas, la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) impartió un taller de elaboración de pan de muerto, para vincular a los estudiantes de distintas carreras con chefs egresados de la misma casa de estudios.
Naranja, azahar y azúcar: aromas de la tradición, lleva por nombre el curso presencial, realizado en los talleres gastronómicos de la UAQ campus Aeropuerto, donde estudiantes de ingeniería, arquitectura, danza entre otros, aprendieron la preparación de esta receta.
Este curso fue organizado por la Facultad de Filosofía de la Universidad Autónoma de Querétaro a través de su restaurante-escuela El Metate y el enlace de Educación Continua de esta unidad académica.
Durante el curso, 10 alumnos comenzaron a trabajar la masa, misma que después entraría al horno para salir transformada en un delicioso pan de muerto espolvoreado de azúcar.
Los jóvenes trabajaron bajo la dirección del chef Josué Gutiérrez Hernández, egresado de la primera generación de Gastronomía de la UAQ, quien supervisó las cantidades y la elaboración de la masa hasta tener la consistencia correcta.
En el laboratorio gastronómico, donde usualmente los alumnos aprenden y practican repostería, dominó un rico olor a naranja, uno de los ingredientes principales de esta tradicional pieza de pan dulce.
Frida Orozco, enlace de Educación Continua de la Facultad de Filosofía, señaló que la respuesta de los interesados en participar en dicho taller fue mejor de lo que esperaban.
Inicialmente se contemplaban sólo dos fechas para impartirlo, pero debido a la respuesta, contemplan abrir una tercera sesión el 6 de noviembre.
“Queremos impulsar la investigación en cosas tan tradicionales como la elaboración del pan de muerto, que implica prácticas culturales que son fundamentales por su tradición tan exclusiva del país. Nos gustaría hacer esto mismo con otras comidas tradicionales, por ejemplo, los chiles en nogada, para que conozcan estos platillos y tradiciones más allá de sólo aprender la elaboración”.
“Tenemos la intención de vincular a la comunidad con nuestros programas que tienen que ver con gastronomía, a la gente que tenga intereses en esto, tengan o no experiencia; por eso, este era un proyecto conjunto entre Filosofía y Gastronomía. Son cursos cortos en donde aprenderán todos los procesos de elaboración de pan.
Explicó que cada uno de los grupos se conforma por máximo nueve personas, con el fin de respetar las medidas sanitarias como la sana distancia, además del uso de cubrebocas, que es un requisito obligatorio.
Este, al igual que otros programas, tiene el objetivo de ligar a los universitarios con los egresados de esta misma casa de estudios, para conformar un círculo de productividad y enseñanza.
Este primer curso tuvo como invitado al chef Josué Gutiérrez Hernández, quien lo dirigió.
“Josué Gutiérrez es uno de los colaboradores de este proyecto, para los próximos grupos tendremos otros chefs, buscamos formar a los estudiantes y al mismo tiempo dar oportunidades a los egresados, por eso tratamos de vincular a ambos sectores”
El taller sobre elaboración de pan de muerto va dirigido a toda la sociedad y no únicamente a la comunidad universitaria. En este sentido, Frida Orozco señala que el segundo grupo se conforma no sólo por alumnos, sino también por personas externas a la universidad.
Aunque el objetivo del taller es generar un vínculo entre el público con intereses recreativos o profesionales en la gastronomía y la Licenciatura en Gastronomía que imparte esta casa de estudios, tampoco se limita a personas con conocimientos previos sobre el tema, sino también para estudiantes de cualquier licenciatura e ingeniería.
Para inscribirse al próximo taller, a realizarse el 6 de noviembre, que ofrece el restaurante-escuela El Metate UAQ, se deberá proporcionar al correo: educacioncontinua.ffi@uaq.mx o al teléfono 442 1921200, Ext. 5806, el nombre del participante, correo electrónico, número de teléfono y el tipo de cuota que les corresponda.
El costo para estudiantes de licenciatura o posgrado de la Máxima Casa de Estudios del estado es de 750 pesos; para trabajadores administrativos o docentes, de mil pesos; mientras que para el público en general, la inversión es de mil 500 pesos e incluye la materia prima.