Vita Manus (la vida de las manos) es lo que reflejan decenas de abuelitos que crearon máscaras, antifaces, títeres y muñecos de calcetín.
Es poco antes del medio día, y en el patio del Asilo San Sebastián ya aguardan las mesas de exposición: sobre ellas, las piezas que fueron creadas por quienes residen en este lugar, en la capital de Querétaro.
En la primera mesa sobresale la presencia de cerca de 13 muñecos, cada uno fue forjado sobre una calceta.
Todos resaltan por sus coloridos atuendos: bufandas en color rosa, un collar amarillo con una perla, bigotes de limpia pipas, narices redondas y distintivos looks que se aprecian en la cabellera de cada uno de ellos.
El títere de calcetín elaborado por Dolores Molina, residente del asilo, destaca por ser uno de los de mayor tamaño, pero también por ser uno de los de sonrisa más pronunciada.
Muy cerca también está el trabajo realizado por Miguel Olmos, que se distingue por portar cabello en color amarillo.
En la misma mesa, con ojos en forma de estrella, se encuentra la creación de Rosa Olvera.
En seguida están los títeres con forma de estrella, uno de ellos fue el elaborado por Alberta Buenrostro; cada pico es resaltado por una bolita rosa, en su interior hay una variedad de colores.
Muy próxima también está la mesa que expone las máscaras africanas.
Con ojos, nariz y boca perfectamente marcados está la pieza diseñada por Ofelia Rivera.
En la última mesa de exposición continúan las piezas sin igual: los títeres circulares. Una base de esfera de unicel da vida a estos peculiares personajes.
Elvia García creó un sonriente títere color vino, con una nariz rosa y una pronunciada cabellera. Con ojos saltones, cabellera amarilla, se aprecia el diseño al que dio vida Rosa Olvera.
Las piezas de exposición están listas para ser apreciadas; los visitantes pasan y observan a detalle cada diseño y pieza que han creado los adultos mayores del asilo, no sin antes hacer una pausa para reconocer el trabajo y empeño que plasmaron cada uno de ellos.
Después de la entrega de reconocimientos, la exhibición transcurre, pero también se genera un momento de convivencia, entre los autores de cada obra expuesta.
Vita Manus tiene como objetivo estimular las capacidades de mujeres y hombres que residen en el asilo, refiere la directora operativa de la institución, Elizabeth Ugalde Álvarez.
El proyecto, explica, surge de la mano de la promotora cultural María José Delgado, en apoyo de la Secretaría de Cultura municipal.
“Vita Manus, que es la vida de las manos, [tiene como objetivo] que los abuelos… cuando nosotros creemos que ya no podemos hacer muchas cosas, al final del día pueden hacerlo, como el pintar. Para alguien que tiene un deterioro cognitivo a veces es muy difícil copiar, seguir líneas y ellos lo han logrado. Estamos contentos, son pequeños logros. Después de la pandemia empezamos otra vez a reactivar las actividades, a abrir las puertas de la institución, para que mucha gente se sume”.
Fue durante dos meses que los residentes del asilo trabajaron en el desarrollo de esta actividad, la cual concluye con la exposición de sus trabajos.
“Ellos estuvieron trabajando por dos veces a la semana, pintaron máscaras africanas, diferentes actividades, desde pegar papelitos, como a veces es difícil para ellos el sujetar, el pegar, el poner, y lo han logrado, les causó una distracción, pero sobre todo, cuando lo lograban, tenían esa sonrisa de haberlo hecho”, menciona.
A través de estas dinámicas, comparte, se pretende que el asilo sea un espacio muy activo, además, de -luego de las restricciones por la pandemia- retomar las visitas de la sociedad, para compartir momentos con los adultos mayores.
“Queremos de verdad ser un asilo muy activo, que permita a la sociedad venir, abrazar, escuchar, apapachar a los abuelos, que no sea una casa que solamente dé techo y comida, que también tenga el cariño de la sociedad. Nos gustaría recibir una lluvia de ideas de la población, que digan ‘tenemos una escuela y queremos participar con música o vamos a crear cosas nuevas’”, señala Elizabeth.
“Por ello hice un llamado a la población que desee acercarse y sumarse a las actividades que desarrolla el asilo, con el propósito de fomentar la convivencia y la cercanía con los adultos mayores.
“Si alguien tiene un proyecto diferente que diga ‘también quiero hacer algo diferente, queremos innovar’, porque esta población ha sido olvidada por mucho tiempo, entonces, ¿cómo dignificar, cómo regresar a estos ancianos todo lo que ellos no han dado?”, se pregunta.
En este sentido, adelanta que en poco tiempo podrán retomar la actividad de Invita un café a un abuelo, que se solía llevar a cabo los miércoles de 5 a 7 de la tarde, y a la cual puede sumarse la población en general, dentro de las instalaciones del asilo.
Además, para este sábado 18 de junio se tiene previsto una comida y actividades conmemorativas por los festejos del Día del Padre.