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La vasectomía es un método anticonceptivo permanente, en el que se impide el paso de los espermatozoides por los conductos deferentes.
Esta cirugía, que apenas dura unos 15 minutos, consiste en una pequeña operación sin bisturí, utilizando anestesia local para cortar el conducto espermático.
Aunque la vasectomía es un método anticonceptivo que surgió en 1974, hoy en día todavía es un tema tabú y lleno de falsas creencias relacionadas con el machismo y el temor a “perder la hombría”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que en el año 2005, el 94.4% de las parejas encuestadas prefirió la ligadura de trompas como método de planificación familiar, y sólo el 5.6% optó por la vasectomía.
En México, según la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2009, realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), sólo el 3.1% de las personas de 15 a 48 años prefirió la vasectomía como método de planificación familiar.
El 18 de noviembre es el Día Mundial de la Vasectomía Sin Bisturí, y para concientizar sobre los beneficios de este método anticonceptivo, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) realiza una jornada de vasectomías totalmente gratuitas, del 17 al 21 de noviembre. Sin embargo este procedimiento se realizan de manera permanente en dicha institución.
Quince minutos que cambian tu vida. Magdiel Santos Vidales, cirujano certificado en vasectomía sin bisturí y encargado del módulo de Planificación Familiar en la Unidad de Medicina Familiar 8 del IMSS, en El Marqués, comparte que uno de los slogans de esta campaña de vasectomía es “Quince minutos que cambian tu vida”, aludiendo a que dicho método no sólo es rápido, sino también efectivo.
Por desgracia, dice, el número de hombres que eligen la vasectomía como método de planificación familiar, aún es muy bajo. La causa principal es la desinformación y el miedo a dicha cirugía.
“La mayoría de los hombres descarta de inmediato la vasectomía, ni siquiera se interesan por buscar información, la causa principal es el miedo y esto es porque no conocen el procedimiento, también hay muchos comentarios machistas, nadie quiere ser el único en hacerse la vasectomía, cuando vienen aquí lo primero que preguntan mis pacientes es ‘¿muchos hombres hacen esto’? El número de hombres que decide hacerse la vasectomía aún es muy bajo”.
“La vasectomía consiste en cortar un centímetro de los conductos espermáticos, con esto, aunque el semen seguirá produciéndose ya no pasará y no habrá embarazos. Es un procedimiento que dura 15 minutos, se realiza en consultorio, ni siquiera hay necesidad de entrar a quirófano; se utiliza anestesia local, la cantidad de anestesia es la misma que utiliza un dentista”.
“Lo primero que le digo a mis pacientes es que no hay dolor, porque ese es el principal miedo, si acaso la única molestia que sienten es el de la anestesia y aún así es mínimo, se aplica con una aguja para insulina”, detalla el especialista.
Además de ser un método rápido y seguro, Santos Vidales reitera que después de la vasectomía no se requieren más que cuidados mínimos, lo que permite que los hombres continúen con su rutina diaria sin ninguna complicación.
En sus 30 años de experiencia como médico, el encargado del Módulo de Planificación Familiar sí percibe un avance en la difusión social de los beneficios de la vasectomía, y el involucramiento del hombre en temas de planificación familiar. Detalla que cada vez son más los hombres jóvenes que deciden realizar dicho procedimiento quirúrgico.
“Sí hay avances en el tema, aunque nos falta mucho más. Hace algunas décadas yo hacía vasectomías a hombres que ya tenían 5 o 7 hijos, ahora la mayoría son hombres jóvenes que tienen 1 o 2 hijos, o incluso que no tienen ningún hijo y tampoco quieren tenerlos, por lo regular son hombres con carreras profesionales, pero tenemos que llegar a todos los sectores”.
Para apoyar a mi esposa, me realicé la vasectomía. Hace 2 meses, Olmo Martínez, de 32 años de edad, decidió hacerse la vasectomía. La decisión fue completamente personal, y su principal motivación fue el apoyar a su esposa después de pasar por 2 embarazos complicados.
“Los dos partos fueron complicados y no quise que mi esposa pasara por otra cirugía más para dejar de tener hijos, entonces dije ‘ahora me toca a mí’, creo que el tiempo que tardé en que me realizaran la vasectomía y las molestias que pude sentir, no se comparan con lo que pasó mi esposa”.
Para Olmo, la vasectomía se realizó sin problemas, el procedimiento duró aproximadamente 15 minutos, y entró y salió caminando del consultorio, sin ninguna complicación.
Confiesa que el tema aún causa escozor entre familiares y amigos, lo atribuye completamente a la desinformación y al machismo. Por lo que considera que los pocos casos de vasectomía en México responden a un tema cultural.
“De los familiares o amigos que supieron de mí, recibí comentarios de todos, desde felicitaciones hasta comentarios absurdos como ‘ya no te va a funcionar’, ‘eres menos hombre’, cosas completamente sin sentido, incluso esos comentarios vinieron de algunas mujeres. Es un tema cultural que debemos cambiar poco a poco, estamos en el siglo 21, creo que ya es hora de que los hombres seamos más responsables y también nos involucremos en la planificación familiar”.
“Algo que noté es que los hombres de mi círculo familiar o de amigos, se acercaron a mí y me preguntaban sobre la vasectomía, preguntaban cómo era, si dolía o no; buscaban información y eso es lo que necesitamos”, comenta.
