Una familia integrada por dos adultos y tres menores espera afuera de una camioneta van, en el estacionamiento de un súper mercado en la lateral de la carretera México-Querétaro. En este lugar, muy cerca del Estadio La Corregidora, esperan abordar su viaje, en un servicio que da transporte a otras ciudades del centro del país. Cubren destinos como la Ciudad de México, Cuautla, Cuernavaca y Puebla, a precios un 50% o más económicos que un autobús de línea.
Los choferes también brindan informes a quienes se acercan a preguntar por el servicio, que incluso se promociona en redes sociales.
Una mujer joven llega con su maleta y se acerca a donde está estacionada una camioneta Toyota Hiace; pregunta y busca sombra para protegerse del sol. Viaja a la Ciudad de México, para lo cual paga 180 pesos. Un boleto de autobús “estándar” para la capital del país cuesta 440 pesos en promedio, con dirección a la Central del Norte. Estas camionetas, que tienen el mismo destino, pueden dejar a los pasajeros en distintos puntos: Tepoztlán, Auditorio Nacional, Perisur, son algunas de las paradas donde bajan pasajeros.
Aunque la clienta reconoce que el precio es más accesible que viajar en camión, también afirma que puede no ser tan seguro: “Pensamos que son choferes profesionales, que no son personas que sólo saben manejar, sino que recibieron alguna capacitación. Los he usado varias ocasiones y no se viaja mal. Es una alternativa para quienes tenemos que viajar y no queremos gastar mucho o que vamos con presupuesto reducido… o somos tacañas”, dice la mujer mientras ríe.
Otra joven llega hasta el mismo lugar; lleva una mochila y dos bolsas extra. Un hombre de mediana edad la espera a lado de un vehículo sedán, se saludan de forma “institucional” y suben al auto.
Ella también viaja a la Ciudad de México y él ofrece el servicio en su coche particular. Es la manera en la que viajan muchos queretanos, no sólo a la capital del país, sino también a entidades como Morelos, San Luis Potosí, Hidalgo y Puebla.
El servicio lo brindan conductores de camionetas vans y en el caso de los automóviles sedanes lo hacen a través de una aplicación en la cual las personas que viajan a determinada ciudad pueden anunciarlo, y quienes vayan al mismo destino lo pueden hacer en el vehículo, pagando su respectivo “pasaje”.
En el estacionamiento, desde temprana hora, se puede observar a la gente que viajará, esperando la llegada de las unidades que los llevarán a sus distintos destinos. Ya sea a la Ciudad de México u otros estados, como Morelos, principalmente con rumbo hacia Cuernavaca, capital de la entidad.
El mayor movimiento se aprecia por las mañanas cuando las camionetas esperan a sus clientes para partir. Los clientes saben los horarios de salida porque cuando apartan su lugar les informan la hora de partida.
También saben los precios que se especifican en el muro de Facebook de las “empresas” que ofrecen el servicio, aunque no es una tarifa fija.
Así, en un mes el pasaje a Cuernavaca, Morelos, pasó de 250 a 280 pesos, mientras que un viaje a Puebla en los mismos términos cuesta 320 pesos.
Una de las “empresas” también ofrece viajes a Monterrey, Nuevo León, pero no informa del precio del pasaje hasta esa ciudad. Incluso en el mismo muro solicita choferes que vivan en estados como Querétaro o incluso Puebla.
Durante los fines de semana y días festivos el movimiento es mayor en el estacionamiento, pues el número de pasajeros aumenta de manera considerable. La demanda es mayor debido a que las personas o salen de paseo o visitan a sus familiares en otras ciudades del país. La migración de personas de otros estados a Querétaro también ha sido factor para que la demanda de este servicio sea mayor.
Esta modalidad de transporte también lo usan quienes buscan empleo en otras ciudades o en Querétaro mismo. Hay quienes lo hacen para acudir a la embajada de Estados Unidos a tramitar su visa y en estas camionetas gastan menos.
Las “empresas” que brindan este servicio son varias. Se promocionan a través de las redes sociales, donde precisan los horarios de salida, destinos y costos. Por ejemplo, viajes de Querétaro a Cuernavaca con paradas en la Ciudad de México, se hacen tres veces al día, de ida y vuelta. A la ciudad de Puebla, desde Querétaro, son dos corridas redondas diario.
“Imagine lo que gasta una familia de cinco integrantes en un viaje en autobús. Son mínimo dos mil pesos. Aquí es menos de la mitad; ya por lo menos tienen mil pesos para gastar a dónde van. Recuerdo que hace menos de 15 años un boleto de autobús a la Ciudad de México costaba 100 pesos. Ahora con eso no llega ni a San Juan del Río. Viajar, por placer o por razones de trabajo está cada vez más canijo y este servicio nos ayuda a hacerlo más económico”, dice la pasajera mientras juega con su maleta antes de partir.
Llegan más pasajeros al estacionamiento de la tienda en la lateral de la carretera México-Querétaro. Es casi la hora para que salgan con rumbo a Cuernavaca con escala en la Ciudad de México, donde al menos la mitad de los ocupantes descenderán.