Si está muy difícil, porque por mucho que tengas guardado, ya no tenemos casi para pagar las nóminas, además imagínate la frustración de que ya casi acabábamos de limpiar, estábamos casi en los últimos detalles, cuando se vuelve inundar todo dos semanas después”, relata Paola Torres, administradora del Hotel del Parque, en Tequisquiapan.

Han pasado 20 días desde que este hotel, junto con otros ocho, los más afectados, cerraron sus puertas a causa de las inundaciones provocadas por el desbordamiento de la presa Centenario en dicha demarcación, lo que dejó sus lugares de trabajo bajo el agua, con pérdidas económicas, de empleos y de patrimonio.

“Ya habíamos secado cuando volvió el agua”; hotel ya no tiene para pagar la nómina
“Ya habíamos secado cuando volvió el agua”; hotel ya no tiene para pagar la nómina

El Hotel del Parque, recuerda Paola, cerró el sábado 18 de septiembre, producto de las fuertes lluvias que se registraron en Querétaro, lo que elevó considerablemente los niveles de la presa; dos semanas después, la noche del jueves 30 de septiembre y madrugada del viernes 1 de octubre, así como el sábado 2 de octubre, se registraron dos lluvias más, que llevaron a la presa a niveles por arriba de 135% de su capacidad.

“Te juro que el nivel [del agua en el hotel] era casi un metro más alto que la vez pasada, ahorita ya bajó, yo he ido diario a ver y sí bajó considerablemente. Sí está cañón porque ya tanto tiempo sin generar, la economía nos está afectando, y luego imagínate al regresar, tenemos las facturas: gas, luz, servicio de cable, internet, teléfono. Para activar un hotel tienes que tener todo eso, todos los servicios al cien”, exclama frustrada.

Paola estima que las pérdidas materiales y los daños a la infraestructura podrían elevarse a los 200 mil pesos, una cifra similar a la que han dejado de percibir al mantener las puertas cerradas; es decir, que han perdido al menos 400 mil pesos en ingresos y en bienes; sin embargo, esta estimación es sólo para un establecimiento relativamente pequeño, de 22 habitaciones, pues hay otros hoteles igualmente afectados, con un número mayor de habitaciones.

“Estábamos en el periodo de limpieza, primero con los bomberos, después nos ayudó la Guardia Nacional, después entre los que trabajamos ahí, haz de cuenta que terminamos el miércoles, y el jueves estábamos detallando, cuando nos avisaron que volvía a venir agua.

“Habíamos fumigado dos veces, ya habíamos lavado y secado y ya sólo faltaban algunos detalles y el olor empezaba a salir, porque son puras aguas negras, empezó otra vez”, agrega.

Golpe tras golpe

Paola Torres recuerda que apenas en agosto de 2020 pudieron reabrir sus puertas tras el confinamiento por la pandemia, lo que había mantenido sus niveles de ocupación bastante golpeados, y apenas un año después estaban logrando recuperarse, por lo que este nuevo golpe viene a afectar la economía de un sector castigado.

“Con el golpe del Covid, del que apenas nos íbamos recuperando, tuvimos que empezar de cero, reabrimos hace un año, igual empezamos con cero.

“Todas nuestras habitaciones están en primero segundo piso, en la parte de abajo tenemos el área del restaurante, pero esa área no lo habíamos podido abrir desde el Covid, por lo que abajo sólo está en el salón de convenciones, el restaurante en el área de recepción y el lobby, y el estacionamiento, pero ahora sí que nuestro producto que nosotros vendemos está intacto, porque está arriba”, señala.

A pesar de que esta semana ya no se han registrado lluvias y el nivel del agua comienza a bajar considerablemente, en Tequisquiapan aún existe mucha incertidumbre entre el sector, pues la alerta continúa por parte de la autoridad municipal y la Conagua advierte que habrá más lluvias.

“Ya habíamos secado cuando volvió el agua”; hotel ya no tiene para pagar la nómina
“Ya habíamos secado cuando volvió el agua”; hotel ya no tiene para pagar la nómina

“Yo calculo que en tres días trabajando súper rudo, de tres a cuatro días podríamos abrir, el problema es que tenemos cero certezas (…) Fuera del apoyo que no te voy a negar sí lo vamos a solicitar, porque cualquier ayuda es buena, del gobierno; de otras instancias o particulares, la mejor ayuda que yo espero es que nos visiten en Tequis, que vengan al hotel, que se hospeden, que reactiven la economía”, solicitó.

Finalmente, reveló que existen empresarios en Tequisquiapan que se están asesorando, pues, de comprobar que la situación se debió a un error humano, por falta de mantenimiento de la presa o de algún otro tipo, se estarían preparando para una acción legal en contra de la Conagua.

“Me quiero documentar bien, porque si algún organismo como la Conagua, o tenemos algo bien documentado, de que esto se generó por un error humano o por falta de atención, me sumaría a tomar algún tipo de acción legal mientras esté bien fundamentado. No podemos estar así, imagínate estar así cada año, con el miedo de que te vuelva a pasar, está cañón”, advirtió.

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