La inseguridad y la falta de oportunidades son los principales motivos por los que Celeste Gómez decidió dejar su natal Xalapa para venir a vivir a Querétaro el año pasado.
Celeste tiene 28 años, toda su vida, hasta hace unos meses, la hizo en la capital del estado de Veracruz, donde su madre y hermano menor aún radican, pero ella decidió probar suerte en Querétaro.
Encontrar trabajo es muy difícil en Xalapa, contó Celeste a EL UNIVERSAL Querétaro. Ella estudió biología, es egresada de la Universidad Veracruzana (UV), pero al no encontrar trabajo en su área, comenzó a buscar empleo de mesera y ayudante de cocina, aun así, aseguró, los salarios son muy bajos y es difícil encontrar vacantes.
Celeste también quería aprender diseño gráfico y en Querétaro una amiga de su prima le da clases para que aprenda el tipo de trabajo que necesitan en la empresa donde trabaja y pueda ir a una entrevista cuando esté lista.
Celeste compartió algunas de las historias que fueron los factores decisivos para fundamentar su decisión de mudarse a Querétaro, aunado a los comentarios positivos que escuchó de sus familiares, y lo que había visto a través de diferentes medios sobre la seguridad y oportunidades de crecimiento que imperan en la entidad.
Dos personas cercanas a Celeste han sido secuestradas en los últimos 10 años. Primero, un primo hermano, y apenas el año pasado, un amigo de su hermano mayor, que además era su vecino.
La familia de Celeste, debido a la situación económica, buscó ingresar al ámbito empresarial y emprender su propio negocio, un restaurante-bar con ambiente familiar, así lo describió ella, quien añadió que su hermano menor tuvo la idea de conformar una sociedad para abrir el lugar llamado La Bonita.
Después del cierre del negocio, su hermano menor inició de nuevo a buscar trabajo, y ahora será el encargado de una cafetería en el centro de la ciudad, ya que de acuerdo con Celeste, como están las cosas en Xalapa, “a veces conviene más ser empleado”.
Celeste asegura sentirse bien viviendo en Querétaro porque ya ha hecho amigos, encontró trabajo de inmediato, además de que entrará en próximos días a una empresa de diseño gráfico, que era su objetivo; todo eso la ha motivado para quedarse por tiempo indefinido en la entidad, sumándose así a las aproximadamente 67 personas que llegan vivir al estado por día, según datos oficiales.
Refiere que siempre llevará a su natal Xalapa en el corazón, y aun cuando la extrañe, las condiciones de vida y las oportunidades en esta ciudad, aseguró, son mejores.