Justo unos minutos después de que se dio la noticia de la intervención rusa en Kiev, a la ucraniana radicada en Querétaro, Elena Levchenko, le comenzaron a llegar cientos de mensajes de sus amigos queretanos para saber cómo se encontraba.
Al leerlos, los ojos de Elena se ven vidriosos, las lágrimas quieren salir, pero toma aire y revisa la noticia de los bombardeos en su país natal, información que le parte el corazón.
“Todo mi corazón está ahorita en Ucrania, me siento muy nerviosa, toda la noche estuve llorando, estuve pensando en mi país, en mi familia, pero sobre todo en los niños que van a vivir todo eso, una guerra fría muy cruel porque mucha gente va a morir y van a sufrir, no quiero ninguna guerra en mi país”, comenta.
Destaca que es una guerra en la que se pelea el territorio, un conflicto que lleva muchos años y a decir de Elena, una pelea sin sentido.
“Ayer en la noche estuve checando las noticias, vi las primeras explosiones cerca de Kiev y lo primero que hice fue marcarle a mi papá y preguntarle cómo está, todo bien y mi papá no sabía”, cuenta.
Elena agrega que al comunicarse con su papá —quien vive al sur del país— vía mensaje, él le dijo que todo va a estar bien, al grado de que no piensa abandonar el país pese al conflicto bélico.
“Mi papá me dijo —no [me voy], hasta el final voy a estar aquí en Ucrania— es difícil oír eso, pero él es así es, es patriota, yo entiendo, pero me pone muy nerviosa que se quede”, dice.
Durante la charla con su padre, cuenta, él le dijo que no pensaba hablar en ruso, “hablamos dos idiomas, ruso y ucraniano, me dijo que no pensaba hablarme en ruso y me dijo ‘vas a hablarme en ucraniano’ para demostrar el amor a patria”.
Elena llegó a Querétaro hace 10 años, conoció a un mexicano y ante el enamoramiento se quedó. En su país natal trabajaba como maestra. Es filóloga de profesión, y por ende siempre ha estado ligada a la cultura; por ello defiende al país, lo que el gobierno ruso, dice, quiere invadir.
Asegura que Ucrania es más que Rusia, no son iguales, incluso, “Ucrania fue antes que Rusia”, señala.
“Tenemos nuestro idioma, un territorio propio, su cultura y es algo que no puedes destruir solo así, su historia, su folclore, muchas cosas y Ucrania no es parte de Rusia, toda Ucrania y toda la gente queremos [ser] independientes en territorio propio y no estar en guerra”, dice.
Si bien, la zona geográfica con Rusia hace pensar que los ucranianos son rusos, para esta ciudadana de Kiev hay diferencias muy marcadas con sus vecinos “la cultura, la gastronomía, el idioma es muy diferente, la música es muy diferente, [hay] lugares diferentes, el traje nacional es diferente, nuestras tradiciones son muy diferentes, mientras que las similitudes entre ambos son sólo el idioma y la religión”, menciona.
Hasta ahora de lo que se ha enterado, es que habitantes de la región central de Ucrania, ya dejaron sus hogares, y dice que si ella estuviera en estos momentos en su país, correría a la casa de su abuela.
“Me escondería en el pueblo de mi abuela, en la naturaleza de la zona donde ella vive, lejos de las ciudades grandes, porque cuando vives en un departamento, a mí me da miedo estar en un lugar cerrado, prefiero estar en casa de mi abuela, con mi familia y escapar de las ciudades, porque puedes morir en cualquier momento si intentas escapar”, señala.
Elena dice que escapar es complicado, todo se cierra, no hay dinero, por lo que no se sabe qué hacer. “¿Qué hacer? sólo escapar con tus documentos y efectivo porque todo está cerrado y tú ¿qué vas a hacer?, no puedes hacer nada, sólo escapar a algún lugar lejos del conflicto, te llevas tus documentos”.
El padre de Elena es un funcionario del gobierno de Kiev dedicado a la cultura, y eso la ha tenido cerca de las expresiones artísticas, de ahí su afición a la pintura.
Ella plasma en sus cuadros lo que más le gusta de México, de lo que se ha enamorado de este país, los colores, las formas, los paisajes.
“Soy artista y algo que me gusta, es pintar, y tengo una colección llamada Querido México Verde y Colores”, detalla.
Destaca que las colecciones están listas para ser expuestas, pero para demostrar la desesperación y miedo que siente al ver a su patria bajo fuego y poder sacar esas emociones en los trazos y los colores ya piensa en una tercera colección: pintará niños.
“Una tercera colección será sobre Ucrania y se llamará Emociones (...) Ahorita estoy en un cuadro de niños chiquitos, en mi corazón y en mi mente dedicaré este a los niños, porque tengo una hija chiquita y me imagino cómo las mamás de allá están sufriendo y están preocupadas por sus hijos y eso lo voy a expresar en mis cuadros”, refiere la artista.
Elena tiene la esperanza de que el conflicto pase rápido, ella desea que en su país prevalezca la unión y la paz, que entre los mismos ucranianos y los rusos ya no haya más divisiones, que sean amigos y por lo tanto quiere ver feliz a su país.
“Quiero a mi país con libertad, esperemos que un día yo pueda viajar a mi país sin problemas y ver que todos son amigos y sentirme orgullosa de ser ucraniana”, expresa.
Se estima, añade, que en esta entidad habitan unos doscientos ucranianos, según datos de Elena, ya que ella es representante de este país ante la feria de comunidades extranjeras que organiza cada año el gobierno municipal de Querétaro.