“La poesía no tiene utilidad inmediata pero es absolutamente indispensable”, fue una de las frases que el poeta, diplomático y ex rector de la Universidad Autónoma de Querétaro, Hugo Gutiérrez Vega, pronunciara durante su discurso de ingreso a la Academia Mexicana de la Lengua el martes pasado.

La ceremonia de ingreso se efectuó en la sala Manuel M. Ponce, del Palacio Nacional de Bellas Artes, de la ciudad de México, y el poeta ahora ocupa la silla XXXIV de esta institución, en lugar del poeta nayarita Alí Chumacero, fallecido en 2010 y en quien el maestro Gutiérrez Vega centrara parte de su discurso.

Vale señalar que apenas un día antes falleció el escritor Ernesto de la Peña, también integrante de la Academia, por lo que en el presídium de la sesión de ingreso del poeta queretano de Jalisco, en una de las 10 sillas, fue colocado un crespón de luto en su recuerdo y Hugo se refirió a él como su amigo entrañable.

Por su parte, el escritor Gonzalo Celorio destacó que Hugo Gutiérrez Vega debió haber ingresado a la Academia muchos años antes que él, que Hugo debió de haberle dado la bienvenida a otros de los actuales integrantes. También destacó que el discurso mayor de Gutiérrez Vega reside en una paradoja, la de la inutilidad consustancial de la poesía, gracias a la cual acaba por ser tan necesaria como el agua, el pan, el vino y la sal, tal y como el autor lo refleja en un gracioso poema: “Los poetas dijeron versos y agitaron sus plumas en el gran salón/ al día siguiente varias sirvientas lucieron plumas de pavo real en sus sombreros viejos/ ellas opinan que los recitales son buenos para la República”.

En su discurso de ingreso a la Academia de López Velarde mencionó que con el santo olor a la panadería y “…a los combatientes del frío yo no quiero ofrecerles un poema, quiero darles un vaso de leche a cada uno”. De Jaime Sabines dijo que es una verdadera plataforma para cualquier partido político, al que se le agrega libertad, justicia y respeto a los derechos ajenos.

Hugo Gutiérrez Vega nació en Jalisco en 1934, fue rector de la Universidad Autónoma de Querétaro, en el periodo 1965-1967, y le tocó enfrentar a la jerarquía católica al recuperar, para la UAQ, el edificio en el que ahora está la Facultad de Filosofía. Desde aquel episodio la derecha queretana no lo deja en paz, puesto que, a pesar de los años transcurridos, ocasionalmente recibe llamadas telefónicas infamantes. Hugo también fue el artífice de Los Cómicos de la Legua, grupo teatral de la UAQ cuyo esplendor hace lustros que se extinguió como lo ha lamentado el propio ex rector.

Actualmente Hugo Gutiérrez Vega es director del suplemento cultural La Jornada Semanal en donde tiene la columna “Bazar de Asombros”, plataforma en la que sus lectores tomamos aire fresco para respirar en este país que se nos está cayendo a pedazos a pesar de los esfuerzos individuales y colectivos de una sociedad que ve pasmada como las instituciones republicanas van quedando en manos del mejor postor.

Al discurso de ingreso del maestro Hugo Gutiérrez Vega en el Palacio Nacional de Bellas Artes de la Ciudad de México, acudimos un numeroso grupo de queretanos quienes fuimos y regresamos en un autobús de la Universidad Autónoma de Querétaro que Rectoría puso a nuestra disposición y que Abel García condujo con maestría. Gracias Abel.

Por supuesto que “La poesía no tiene utilidad inmediata pero es absolutamente indispensable”.

Escritor