Valentín F. Frías, cronista decimonónico, refiere que a finales del siglo XIX la prole queretana, integrada por indios, negros, mulatos, castizos, saltapatrás, mestizos, tente en pie y otras castas que Frías identificaba como “gente perdida de lo peor de la sociedad”, se congregaban en bailes y saraos para cantar, fumar, tomar y bailar, acompañados por la música de instrumentos musicales pulsados por trovadores que improvisaban décimas de corte político, histórico y de algún suceso relevante de la época.
Esto viene a colación porque las formas y los estilos musicales habrán cambiado con el paso de los años pero las clases populares (la prole, nos dice la familia del presidente electo) continuamos reuniéndonos para abrazarnos de manera solidaria como una forma de protección ante la imposición de proyectos, muy alejados de nuestra nación, que sólo favorecen a las encumbradas élites gobernantes.
Tal es el caso de la colonia Vista Alegre Maxei (Maxei es un vocablo que significa Querétaro en lengua hñañho u otomí), primera colonia autónoma de Querétaro que este septiembre cumplió 27 años de existencia.
Ubicada al sur, en la carretera a Huimilpan, se engalanó con la presencia de los atletas campesinos, The Instrumental Ska Band y Guillermo Velázquez y Los Leones de la Sierra de Xichú. Los diferentes géneros de estas agrupaciones musicales que van del reggae, el ska, el son arribeño a la poesía decimal campesina (forma poética musical que se mantiene desde la época de la Colonia), nos muestran la pluralidad de gustos e ideas entre los habitantes de esta zona que no nos dejamos engatusar por la música pop en español y en inglés, cuya caducidad es de escúchese y tírese.
La colonia Vista Alegre Maxei nació gracias a la lucha de un numeroso grupo de ciudadanos que se organizaron para gestionar, ante diversas instancias gubernamentales, lotes para vivir; una vez conseguido este objetivo, en una ecuación simple, pero que en la realidad, ante el cada vez mayor individualismo de nuestra sociedad, se antoja lejana e imposible, siguieron trabajando como hormigas en la edificación de cada una de las casas, en un proyecto de autoconstrucción, comprando tabique, cemento, varilla, calhidra, grava y arena en cantidades grandes lo que abatió el costo de los mismos, para después poner literalmente manos a la obra y entre ellos mismos levantar casa por casa, fue así que todos y cada uno de los colonos participaron en las faenas comunitarias.
Por supuesto que la lucha de los colonos de Vista Alegre Maxei no ha sido fácil y el peor momento por el que han atravesado fue durante 1998, justo al arribo de los gobernantes del Partido Acción Nacional al poder. En aquel año fue encarcelado Sergio Gerónimo Sánchez Sáenz, el líder más visible de la colonia, quien permaneció recluido en el penal de San José El Alto seis años.
El aniversario 27 de la colonia Vista Alegre Maxei concluyó con un encuentro político social entre diversas organizaciones sociales que plantearon proyectos y demandas, así como la discusión sobre la construcción de la identidad política del movimiento social en el estado, al mismo tiempo en que gozaban del baile y la música chavos banda, ex hippies, neohippies, rastafaris, luchadores sociales, grafiteros, ex luchadores sociales, rockeros, trovadores, punketos, y todo tipo de hombres y mujeres libres que, al igual que la “gente perdida de lo peor de la sociedad” como llamaba Valentín F. Frías a la prole decimonónica, buscan libertad, justicia y dignidad.
Escritor
