Vayan desde estas líneas un profundo reconocimiento al licenciado Enrique Peña Nieto, por su contribución (in)voluntaria al despertar de los indignados mexicanos. Gracias a este personaje -que el duopolio de Televisa y TV Azteca pretenden imponer en la presidencia de la República-, nació el movimiento universitario #YoSoy132. Ni falta hace recordar que el ex gobernador del Estado de Méxco provocó a los jóvenes el pasado 11 de mayo en la Universidad Iberoamericana, al intentar cruzar con su infinita ignorancia la cristalería del mundo de la ideas, provocó el nacimiento de la primavera mexicana; así nacimos los indignados que seguimos el ejemplo de Herman Hesse, joven de 90 años (juventud acumulada, como bien dice el maestro Miguel León Portilla). En unas cuantas semanas que tiene de vida la primavera mexicana, capítulo Querétaro, ha realizado diversas marchas contra la imposición de Enrique Peña Nieto, personaje impulsado por Carlos Salinas de Gortari, el dinosaurio mayor, copete de hueso. El movimiento #YoSoy132 clausuró las oficinas locales del Instituto Federal Electoral, la tienda Soriana de Constituyentes, el Diario de Querétaro, así como el edificio de Televisa Querétaro; también se manifestó ante el auditorio Josefa Ortiz de Domínguez, el día en que el gobernador José Calzada Rovirosa, ofrecía su tercer informe de gobierno; fueron alrededor de tres mil manifestantes que protestaron ante el mandatario queretano, en un suceso inédito ante un gobernador en nuestra entidad. Vale señalar que muchos rucos de corazón joven, como quien esto escribe, enseguida nos sumamos a esta oleada juvenil que también ha arrastrado a los esperpénticos y anquilosados liderazgos de la izquierda partidaria. Como bien dice nuestro querido poeta Jaime Sabines, “Porque a estas alturas, la juventud sólo puede llegarme por contagio”, me he acercado a este movimiento que en Querétaro, y en el país, lucha en contra de la imposición de Enrique Peña Nieto y por la democratización de los medios. Es tal la energía y la creatividad de #YoSoy132 que en las redes sociales y en las marchas podemos escuchar “Un derecho de nacimiento”, himno de los indignados mexicanos, de la autoría e interpretación de Natalia Lafourcade, hija del maestro Gastón Lafourcade, profesor de Bellas Artes de la Universidad Autónoma de Querétaro: Voy a crear un canto para poder exigir que no le quiten a los pobres lo que tanto les costó construir para que el oro robado no aplaste nuestro porvenir y los que tienen de sobra nos les cueste repartir. Yo no nací sin causa yo no nací sin fe. “Un derecho de nacimiento” es interpretado colectivamente por #MúsicosconYoSoy132, cuyas principales integrantes son Natalia Lafourcade y Carla Morrison. Por supuesto que este movimiento juvenil, que puso en jaque al tiranosaurio rex, no se explicaría sin la democratización existente en redes sociales, principalmente Facebook, Youtube y Twitter. Sin embargo, la nota discordante, como siempre, proviene de los sectores más reaccionarios de nuestro país, que acusan a los manifestantes de violentos, cuando, en ningún momento, han agredido a nadie, no han pintarrajeado ningún muro y, como se dice coloquialmente, ni siquiera han roto un plato.