En los últimos días ha estado en boca de la oposición la salida de Azucena Uresti de Milenio TV, periodista con una trayectoria de más de 20 años, y hace una semana se despidió de uno de los programas nocturnos más importantes del canal. Justamente el viernes pasado la conductora anunció que dejaba su espacio en la televisión “dadas las circunstancias”, manifestación que causó tal revuelo que le preguntaron al presidente López Obrador si las supuestas “circunstancias” tenían algo que ver con él o si se trataba de un acto de censura, a lo que el mandatario respondió que nunca solicitaría a ningún medio de comunicación que despidieran a algún periodista y que además, el dueño de ese medio de comunicación era su amigo. De tal declaración, propios y extraños trataron de hacer leña del árbol caído asumiendo que la televisora habría prescindido de la labor de la conductora bajo la presión de Presidencia como un acto de censura y como era de esperarse, Xóchitl, Marco, Alito Moreno, Denise Dresser, Margarita Zavala, Felipe Calderón, Brozo, entre otros, salieron en la defensa de la conductora alegando que el “autoritario” presidente López Obrador había obligado a la televisora a silenciar a la periodista. Sin embargo, tardó más la derecha en comenzar a hacer escándalo que Milenio en salir a aclarar la situación.

En redes, Milenio filtro un comunicado en el cual se revelaba que la conductora salió del espacio televisivo debido a una invitación a un programa radiofónico matutino, este en Radio Fórmula, aseverando que desde hace varias semanas había notificado su renuncia.

Con dicha aclaración queda evidenciado que ni el Presidente, ni nadie bajo su mando, tuvo que ver con la salida de Azucena de Milenio TV, y por consiguiente, la supuesta censura jamás existió.

Todo esto nos recuerda por qué el Presidente desde el comienzo de su sexenio, de forma diaria, ha salido a comunicarle al pueblo sobre diferentes temas, pues es claro que hoy en día, con tanta información disponible, es fácil perderse en la guerra sucia de los opositores, evidenciando una y otra vez que desinformar a la ciudadanía, sembrar miedo y generar incertidumbre es su forma de ser oposición, en lugar de centrarse en hacer un buen trabajo donde existan propuestas reales.

Este tipo de información sustentada solamente en el chisme confirman lo que todos ya sabemos, que tienen un profundo desinterés por mejorar nuestro país y que lo único que les importa es desprestigiar y desacreditar todos los esfuerzos de la Cuarta Transformación.

La oposición demuestra todos los días que puede más su odio que su responsabilidad con las y los mexicanos.