La semana pasada, en un ejercicio más de comunicación transparente y eficiente de la virtual presidenta electa, se anunciaba la continuidad al proyecto de un tren de pasajeros en gran parte de nuestra República.

El anuncio fue bien recibido por las personas de los medios y los ciudadanos, pero mejor recibido por las personas electas en el pasado proceso electoral.

Se trata de la continuidad a uno de los proyectos más ambiciosos de la Cuarta Transformación. Una obran tan grande e importante, que significaría un parteaguas en la historia de nuestra nación. Para no variar.

De entrada, se visualiza una generación de empleos a corto, mediano y largo plazo; no sólo se trata de construir una conexión de más de mil 200 kilómetros entre las ciudades más importantes de nuestro país, si no también, del mantenimiento de vías, de estaciones ferroviarias, turismo, comercio y muchas otras actividades que se relacionarán íntimamente con la actividad.

Uno de los tramos más importantes del tren de pasajeros que anunció la doctora Claudia Sheinbaum Pardo es el que conecta el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) con la ciudad de Pachuca, Hidalgo, lo cual significa que le dará seguimiento a las obras de nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador, y que fortalecerá las estrategias de crecimiento y exposición de nuestra nación.

Además del tramo AIFA-Pachuca, otro de los más esperados por los queretanos es el tramo México-Querétaro-Guadalajara, el cual beneficiaría a gran parte de la población que reside y/o trabaja en uno de estos tres estados, ya que implicaría una reducción de tiempos de traslado, disminución de tráfico vehicular en una de las autopistas más transitadas de la República, una mayor derrama económica (especialmente en un destino turístico tan bello como nuestro estado), y algunos otros beneficios económicos, ambientales y sociales que traerá la presencia de un tren de pasajeros.

Algo que no se debe dejar pasar es que la noticia fue tan bien recibida por algunos políticos, que incluso han hecho declaraciones sobre “la disponibilidad de colaborar con la presidenta electa”, con tal de que haya vías en sus municipios.

El oficio político de la doctora Claudia Sheinbaum ha puesto a trabajar a la oposición para tratar de tener un poco de reflector, otra vez; estoy segura de que esa será la dinámica de todo su sexenio.