El gobierno de Mauricio Kuri González en Querétaro, que inició el 1 de octubre de 2021, exhibe que carece de brújula para resolver las problemáticas de transporte público y agua que sufren cientos de miles de habitantes en la entidad.

A casi 21 meses que comenzó el sexenio (el próximo viernes 30 de junio alcanzaremos ese periodo de tiempo), el titular del Ejecutivo estatal, su gabinete y el partido político que representa (PAN) tropiezan con estos temas.

Junto con la inseguridad pública, el aumento en la incidencia delictiva del fuero común y la falta de estrategia e inclusión en movilidad, se han convertido en una especie de piedras u obstáculos que incomodan, quieren minimizar. Cuando intentan solucionar algo, únicamente muestran su desprecio a la inclusión social, y a escuchar exigencias o peticiones.

Tanto el martes 13 como el lunes 19 de junio, dos hechos mostraron “de cuerpo entero”, frase del habla coloquial, al gobierno de Mauricio Kuri. Primero, en la comunidad de Escolásticas, municipio de Pedro Escobedo, policías estatales y municipales agredieron a habitantes que buscaban defender el manantial del lugar. Represión.

La agresión se puede verificar por distintas fuentes (videos, fotos, testimonios). Aunque se criticó y puso en duda quiénes habían marchado con pancartas en Plaza de Armas horas después, la realidad en contexto es que la agresión fue otro caso de conflicto sociohídrico durante el gobierno de Kuri: acumula tres (Santiago Mexquititlán, Amealco de Bonfil; la capital y Pedro Escobedo) desde 2021.

Las y los periodistas necesitamos poner los hechos y temas en contexto, además de verificar datos, información y declaraciones.

Hechos: hubo agresión y detenciones contra habitantes de la comunidad el martes 13 de junio, como las hubo el viernes 10 de junio de 2022 en la Avenida 5 de Febrero; como también represión y falta de disposición al diálogo en los pozos que defienden las comunidades en Santiago Mexquititlán.

Eso no lo pueden desmentir las cuentas de Twitter que defienden al mandatario y al gobierno estatal. La “respuesta” del gobierno, si se le puede llamar de alguna forma, ha sido similar en los tres casos: cerrazón y uso de la fuerza pública.

Un texto publicado el miércoles 14 de junio por la periodista Nitzia Pichardo, con infografía elaborada por Mario Ortega, mostró el aumento de conflictos sociohídricos en Querétaro.

Compartido 156 veces y con un alcance de 9 mil 500 usuarios de Facebook, el material periodístico y comentarios evidencian que un sector de la población está indignado con el proceder de la autoridad, y la falta de disposición al diálogo en esta problemática.

Más allá de tomar como premisa que la abundancia o escasez del agua no es culpa de un gobierno o actor político (la problemática también está presente en otros estados), sí lo es la manera en que media o busque solucionar un conflicto social.

Periodista y profesor de la UAQ

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