Además de que no lograron alargar su racha de cuatro partidos sin perder que daba pauta a una lenta pero segura mejoría, Gallos Blancos, tampoco pudo hilvanar un segundo triunfo consecutivo y que hubiese sido el segundo en casa en el presente torneo.
Santos, ahora bajo la batuta de Nacho Ambriz, quien ya también fue técnico de los emplumados, en cambio, conquistó su segunda victoria por la mínima de 1-0 consecutiva y aunque sin jugar espectacularmente, lucen más ordenados, al puro estilo Ambriz, de a poco van escalando posiciones.
Gallos en esta fecha doble sólo rescató tres de seis puntos, llegó a 11 y, al momento de escribir esta columna, seguía en zona de Play-In.
Lo cosa es que los partidos ante San Luis, al que bailaron 4-1 y ante Santos, fueron en casa y por tanto, sólo ante los potosinos pudieron imponer respeto, porque ante los laguneros no fue así y estos vinieron a pegarles en su propio gallinero.
¿Esto qué quiere decir? Que como locales, aún les falta mucho por trabajar para hacer valer esta condición, en concreto, lograr que el Corregidora le pese a cualquier rival, y hasta ahora sucede lo contrario y ya cualquier visitante viene a sacarles puntos.
Mauro Gerk, a quien un sector del público el viernes pasado le gritaba ¡Fuera!, tendrá que seguir trabajando con mayor ahínco, tanto el Tanque como sus muchachos saben que para clasificar, es importante ganar la mayoría de sus compromisos de locales y arañar los que se puedan como visitantes.
Vienen compromisos más complicados cuando faltan siete jornadas para que concluya la fase regular y si Gallos no se apura, no llegará ni a los 19 puntos que acumuló en el torneo pasado.
El próximo sábado por lo pronto visitarán La Bella Airosa para enfrentar a los sorprendentes Tuzos. Se duda que salgan bien librados, pero no hay que descartar un marcador sorpresa; después regresan a casa para recibir a Bravos el 15 de marzo y hasta el 31 visitarán al Atlas.
Cómo se ve, Gallos no tiene de otra que seguir luchando por sumar unidades que le alcancen para el Play-In y de paso para salir de problemas porcentuales. Hasta la Próxima.