Prácticamente todos los días la Presidenta Sheinbaum o algún integrante de su gabinete nos tiran el rollo de que: ”la soberanía no es negociable”, o que: “no vamos a permitir el injerencismos ni violaciones a la soberanía” o que: “la Patria no está en venta y estamos aquí para defender la soberanía” o una frase populista similar.
Todas ellas son para, veladamente, hacernos creer que EU pretende invadirnos para acabar con los ahora narcoterroristas. Posición que, me parece, más bien apunta a que el Gobierno de México busca seguir protegiéndolos —¿qué razón tendría EU de invadirnos? Me parece que ninguna.
Lo anterior con el doble objetivo de, por un lado, apelar al nacionalismo que convoca a cerrar filas para con la Presidenta y su gobierno, y por el otro lado el distraernos de los graves problemas que estamos atravesando y que simplemente el gobierno no atina o no quiere resolver.
Ahora bien, en términos políticos soberanía significa autonomía, independencia y por tanto la no dependencia de persona o pueblo en particular. Ante esto último vale la pena preguntarnos: ¿Los mexicanos, pueblo y gobierno, estamos en condiciones de tomar libremente las decisiones que más nos convienen? A mí me parece que no y lo peor es que no veo que vayamos en el camino correcto hacia alcanzar esa autonomía que nos gustaría tener en un mundo globalizado en el que el bienestar de los pueblos depende del intercambio entre todos ellos.
Ejemplo de lo anterior y desde la perspectiva económica es la falta de programas que estimulen y apoyen la diversificación de los mercados internacionales para los productos mexicanos (que el 80% de las exportaciones nacionales sean hacia EU nos pone en la situación de vulnerabilidad que ya ha sido sobradamente descrita en otros espacios).
Otro ejemplo: Desde la perspectiva de la “soberanía alimentaria” tenemos que poco más del 40% del maíz que consumimos es de importación y el Gobierno de México no logra o no quiere acabar con los grupos criminales que extorsionan a los productores agrícolas de Sinaloa, Michoacán, y otras entidades más, que pudieran producir muchas más toneladas de alimentos y con ello ayudarnos a depender menos de los alimentos importados.
Los ejemplos abundan en prácticamente todas las áreas, y me parece que no estamos desarrollando las opciones, productores, proveedores y mercados, que pudieran reducir nuestras vulnerabilidades de tal forma que dejemos de depender de las decisiones unilaterales de persona o gobierno alguno. Tengamos presente que solo así, sin depender de persona o gobierno alguno, las decisiones que asumamos como país si serán verdaderamente libres y soberanas.
Fuente de los deseos: Ojalá el Gobierno de México asuma su responsabilidad, nos deje de echar rollos sobre la soberanía y entienda que fortalecer y defender la soberanía nacional implica construir las condiciones en las que los mexicanos si podamos generar las opciones que reduzcan nuestras vulnerabilidades de tal forma que no dependamos de nada ni nadie. Insisto, solo así podremos decir que somos soberanos.
Exsenador. @gtamborrelmx