Decepcionado y hasta dolido ni vi ni oí en vivo los posicionamientos de la nueva Presidenta Claudia Sheinbaum, ni al tomar protesta como la primera presidenta en la historia de México en la sede del Congreso de la Unión y frente a la nación —hecho que sin lugar a dudas es muy significativo y que desde luego aplaudo—, ni el discurso que pronunció después en el Zócalo de la Ciudad de México. Las razones son varias, destaco la principal:

La principal razón de ello, y que paradójicamente no le es atribuible a ella, es la enorme decepción que me ocasionó el ya expresidente López Obrador, me explico: En el 2018 no voté por él, sin embargo al escucharlo dar sus posicionamientos tanto en el Congreso al tomar protesta y después en el Zócalo, debo confesar, que me generó una gran esperanza. Sus discursos me parecieron los de un estadista comprometido con todos los mexicanos y que sin duda marcaría, para bien, un antes y un después en la historia del país. Desgraciadamente y al transcurrir su administración observé que no solo no cumplía lo que había prometido, que no solo no cumplía con todo lo que había señalado ese 1 de diciembre de 2018, sino que en los hechos hacía todo lo contrario (por ejemplo: mencionó que sería respetuoso del Poder Judicial y resultó todo lo contrario, prometió honestidad y ahí están los audios que señalan a sus hijos y sus amigos, dijo que acabaría con la corrupción y esta creció a tal grado que su administración resultó la más corrupta hasta ahora, prometió regresar al Ejército a los cuarteles y militarizó al país, etc., etc.).

Es por lo anterior que ahora prefiero observar a la Dra. Sheinbaum en su actuar como Presidenta de México, prefiero ver y sentir que entrega buenos resultados a todos los mexicanos sin excepción. Coincido con ella en el compromiso de “primero los pobres”, pero sin excluir a los demás. Coincido con ella en cuanto a impulsar las energías limpias, en garantizar los derechos humanos, la libertad de expresión y de prensa, y si bien no coincido en el total de sus “100 pasos para la transformación” si lo hago en muchos puntos más. Aprovecho para convocar a todos los mexicanos a sumarse con el Gobierno de México en la lucha por dar exitosamente todos aquellos “pasos” en los que cada quien crea, así como a señalar todo aquello que crean nocivo para el país, para esta y para las futuras generaciones. Yo así lo haré.

En otras palabras, no quise ilusionarme ni generar esperanza alguna y para ello preferí no ver ni oír en vivo los posicionamientos de la primera Presidenta de México.

Fuente de los Deseos: Ojalá que al observar los resultados que la Dra. Sheinbaum entregue a todos los mexicanos sin excepción y entre ellos el de que alcancemos a ser un solo pueblo, unido y en armonía, me arrepienta de no haber visto ni oído en vivo los posicionamientos de la primera Presidenta de México.

Exsenador

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