La solidaridad es una de las características que define al pueblo de México. Nadie puede negar que los mexicanos somos solidarios ante situaciones difíciles donde quiera que estas se presenten, las pruebas de ello y desde hace años son muchas y contundentes. Es por ello que es sumamente lamentable que el gobierno del Presidente López Obrador, traicionando no solo el espíritu solidario que debe existir entre los pueblos sino también a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, no sea solidario con el pueblo venezolano que en estos momentos padece de violencia democrática.

El gobierno mexicano, contrario a lo que sí ha hecho en otros casos —ejemplos: Perú, Bolivia, entre otros— ha sido incapaz de pronunciarse ante las elecciones tramposas y hasta criminales con las que el dictador Nicolás Maduro pretende perpetuarse en el poder.

El presidente López Obrador, interpretando a su conveniencia la Constitución, se abstiene de pronunciarse supuestamente porque la misma Constitución establece que uno de los principios normativos de la política exterior es la no intervención. Sin embargo la Constitución también establece como uno de dichos principios normativos lo siguiente: “el respeto, la protección y promoción de los derechos humanos”. Ello aunado a los múltiples tratados internacionales en materia de derechos humanos y políticos que México ha firmado. En el caso de Venezuela no le pido al Presidente que se pronuncie a favor de uno de los candidatos —eso sí sería intervenir— simplemente que, al igual que lo han hecho la gran mayoría de las naciones del mundo, le pido que solicite y hasta exija transparencia y honestidad democrática.

Por lo anterior manifiesto que me parece vergonzosa la actitud del Gobierno de México de ni siquiera presentarse en la reunión de la Organización de Estados Americanos, OEA, en la que se pretendió emitir un pronunciamiento pidiendo al gobierno venezolano el que se condujese precisamente con transparencia y honestidad democrática.

Finalmente manifiesto que es muy importante que exijamos a nuestros gobernantes que respeten, protejan y promuevan los derechos humanos en todos los rincones del país y del planeta. Recordemos que la falta de dicha exigencia ha llevado a distintos pueblos a padecer verdaderas tragedias. Tengamos presente que hoy se trata de Venezuela, mañana se podría tratar de alguna otra nación, entre ellas la nuestra.

Fuente de los Deseos: Ojalá el pueblo de México nunca pierda esa hermosa virtud que es la solidaridad en la defensa de aquellos que atraviesan situaciones difíciles y ojalá sepamos exigir a nuestros gobiernos que se comporten de manera solidaría con los demás pueblos del mundo. Solidaridad que desde luego, y quizá en primer lugar, comprende la defensa de los derechos humanos.

Exsenador


Google News