Pregunta que todos, y sobre todo la Presidenta Sheinbaum, nos debiéramos hacer.

Hace unos días el secretario de Economía Marcelo Ebrard dio a conocer la enorme diferencia que existe en la inversión extranjera directa china en EU, Canadá y México.

El secretario Ebrard señaló que entre 2016 y 2023 China ha invertido en América del Norte 395,000 millones de dólares de los cuales 269,000 millones los invirtió en EU (68.1% del total), 124,639 millones en Canadá (31.5%) y 1,684 millones en México (0.4%). Como se puede observar existe una enorme diferencia entre lo invertido en nuestros socios comerciales del T-MEC y en México, 160 veces en EU y 74 veces en Canadá.

Por lo anterior me parece fundamental que en México —y sobre todo la Presidenta Sheinbaum— nos preguntemos: ¿Por qué esa enorme diferencia en el monto invertido, cuales son las razones para ello, qué encuentran los inversionistas en EU y Canadá que no encuentran en México?

¿Será la certeza jurídica? ¿Será la calidad de la mano de obra? ¿Será la falta de energía limpia? ¿Será la falta de infraestructura? ¿Será la inseguridad?

Me parece indispensable que investiguemos cuáles son esas razones que hacen que la inversión china prácticamente no se haga en México y que pudieran ser las razones por las cuales no llegan tampoco las inversiones de otros países y que la atención a esas razones se priorice dejando atrás acciones y proyectos impregnados de prejuicios y resentimientos así como de ideologías obsoletas y fracasadas como lo es la mentada “soberanía energética”. De lo contrario no lograremos atraer las inversiones requeridas y con ellas la generación de empleo que tanto necesitamos.

Recordemos que si bien hay problemas que es importante que sean atendidos como la inseguridad, el muy deficiente sistema de salud o el bajo nivel educativo, la generación de ingresos para las familias mexicanas es urgente y prioritaria. Y para alcanzar dichos ingresos, insisto, se requieren de más y mejores empleos (los programas sociales ayudan a las familias a subsistir pero no son suficientes para su desarrollo ni tampoco sostenibles en el largo plazo). Empleos que, vuelvo a insistir, solo llegarán con las inversiones tanto de extranjeros como de empresarios nacionales.

Fuente de los Deseos: Ojalá la Presidenta Claudia Sheinbaum se sacuda de prejuicios y resentimientos y redefina sus prioridades considerando las que son prioridad para las familias mexicanas y entre las que destaca incrementar sus ingresos. Ojalá se dé cuenta de que los mexicanos requerimos con urgencia mejores empleos o bien un apoyo decidido para emprender un negocio —o hacer crecer el que ya se tenga— y no un tren de pasajeros, ojalá se dé cuenta de que necesitamos seguridad y un sistema de salud digno que funcione y no que los jueces, magistrados y ministros sean electos por el voto popular.

Exsenador

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