"¡Chinguen a su madre, qué forma de legislar!”, se ha convertido en la expresión más utilizada por la oposición para expresar su indignación por la manera en que la ilegal mayoría de Morena y satélites aprueba auténticas aberraciones legislativas para consolidar el modelo autoritario que promueven el presidente Andrés Manuel y la vicepresidenta.

La frase la dirigió Muñoz Ledo (5 de septiembre de 2019) a sus correligionarios morenistas, quienes por instrucciones de AMLO rechazaron que un legislador del PAN ocupara el puesto que dejaba Porfirio para resolver una crisis constitucional, hoy el morenista -pero no lopezobradorista- las habría repetido para fustigar la corrupción, autoritarismo, incompetencia, impunidad, encubrimiento, mentiras y autoritarismo de los cuatroteístas; por las mutuas acusaciones de corrupción entre el tabasqueño Adán Augusto y el zacatecano Ricardo Monreal, a los que la vice, lejos de exigirles cuentas, los conminó a no ventilar en público sus trapos sucios; ante el uso de Gobernación como árbitro de problemas partidistas; ante la incompetencia de la Fiscalía General de la República por no citarlos a declarar y a presentar pruebas.

También les habría recetado un “Chinguen a su madre, qué manera de legislar” a los senadores morenistas que aprobaron el robo de 2.4 billones de pesos de recursos de los trabajadores en el Infonavit para dárselos a la vice, quien optó, junto con el director del Infonavit, por escupir al cielo pretextando la corrupción de directivos de esa institución en los dos últimos gobiernos, sin darse cuenta de que el representante del gobierno de Peña Nieto, el ex priísta Alejandro Murat Hinojosa -quien durante su gestión como director del Infonavit tuvo un desfalco de mil 886 millones de pesos-, es hoy senador morenista; y a su sucesor, Carlos Martínez, lo nombró AMLO.

Porfirio habría aplicado su dicho al nombramiento del actual director del Infonavit (impuesto por Andrés Manuel), Octavio Romero Oropeza, el que acusa a otros morenistas de corruptos, pero dejó a Pemex con un quebranto neto de 430.1 mil millones de pesos, la mayor pérdida de la empresa en los últimos 13 años, y con una drástica caída en la producción de petróleo; o a los hijos de AMLO y a otros vivales que se enriquecieron con las obras emblemáticas del pasado sexenio.

Sin duda, una mención especial la habría aplicado a la impresentable “no ministra” Jasmín Esquivel, quien además de la inmoralidad de haber pirateado sus tesis de licenciatura y doctorado, obligó a la UNAM, a través de un recurso legaloide, a desechar la investigación que demuestra su deshonestidad y baja calidad humana y profesional.

Y qué diría de los gobernadores de la 4T que llegaron a sus cargos con el apoyo del narco y a quienes Claudia Sheinbaum en el Consejo Nacional de Seguridad les pidió combatir a la inseguridad, de cara a la llegada de Trump al poder; o a la indolencia de AMLO que permitió que el cártel venezolano “Tren de Aragua”, opere en México, además de en los países que promueven el socialismo del siglo XXI: Venezuela, Brasil, Colombia, Perú, Ecuador, Chile y Bolivia.

Ante el avance del autoritarismo, la destrucción institucional, el empoderamiento de la delincuencia organizada y el futuro de México ante Trump, se entienden las múltiples referencias opositoras lo dicho por Muñoz Ledo tiene vigencia, pero con un agregado: ¡qué manera de destruir al país!

Periodista y maestro en seguridad nacional

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