Las fiestas decembrinas son generalmente sinónimo de celebraciones y comidas deliciosas. Sin embargo, si estás embarazada, es importante saber que ciertos alimentos y bebidas pueden representar riesgos para tu salud y la de tu bebé. Esto no significa que tengas que privarte de disfrutar, pero sí que tomes precauciones para evitar riesgos. Aquí te explico qué debes evitar y los motivos detrás de estas recomendaciones.
Uno de los principales riesgos en las comidas festivas son las carnes crudas o mal cocidas, como carpaccios o carnes término medio. Estas preparaciones pueden estar contaminadas con bacterias como Listeria o Salmonella, que pueden causar infecciones graves durante el embarazo, las cuales se pueden asociar con complicaciones como parto prematuro o infecciones en el recién nacido. Otras comidas frecuentetes en estas fechas son embutidos y carnes frías, como el jamón serrano, las salchichas o el chorizo, los cuales debes procurar evitar a menos que estén bien calentados, ya que también pueden ser portadores de algunas bacterias. Además, presta atención a los quesos que consumes: evita los quesos no pasteurizados, como el brie, el camembert o los quesos azules, y opta por versiones pasteurizadas que son más seguras durante el embarazo.
En cuanto al pescado y los mariscos, debes evitar preparaciones crudas o poco cocidas, ya que pueden transmitir algunos parásitos o bacterias. También es importante limitar el consumo de pescados altos en mercurio, como el tiburón, el pez espada y el atún rojo, se ha reportado que el consumo excesivo de este metal podría afectar el desarrollo neurológico de bebé. Prefiere opciones más seguras, como salmón, tilapia o sardinas bien cocidos. Por otro lado, los huevos crudos o mal cocidos, que a veces están presentes en aderezos o postres, también representan un riesgo, ya que se asocian con un mayor riesgo de salmonelosis.
En cuanto a las bebidas, el alcohol merece una mención especial porque, aunque muchas personas piensan que “una copa no hace daño”, lo mejor es evitarlo completamente ya que en realidad no existe una cantidad segura de alcohol durante el embarazo. Finalmente, no olvides prestar atención a la cafeína, que está presente en el café, el té negro, los refrescos y el chocolate. Aunque no es necesario eliminarla por completo, lo ideal es limitar su consumo a menos de 200 mg al día (aproximadamente una taza de café).
Las fiestas son un momento para disfrutar y celebrar, pero también para priorizar tu bienestar y el de tu bebé. Cocinar bien los alimentos, elegir opciones seguras y evitar riesgos innecesarios te permitirán vivir estas fechas con tranquilidad.
