Exhibidos los desfalcos contra el Infonavit por la corrupción de todo un entramado delictivo que se acusa va desde sus propios trabajadores, notarios, peritos valuadores y despachos que maniobraron con estafas, juicios fraudulentos y el otorgamiento de múltiples “créditos” sobre una misma vivienda social, y la cual alcanzó al estado de Querétaro, el sector inmobiliario privado en la entidad denuncia también un magro capítulo, el de la extorsión por parte de excolaboradores.
Buscan sacar tajada con la amenaza del uso de información confidencial que en su momento conocieron de diferentes desarrollos inmobiliarios con el abuso de confianza que ello implica, la extorsión sobre directivos además del tráfico de influencias al presumir cercanía con alcaldes de diversos municipios del estado.
Los burós de abogados con los que disponen empresas líderes en bienes raíces fueron alertados para actuar en consecuencia y proceder legalmente en contra de “asesores” en el sector que piden fuertes cantidades de dinero para no manchar la imagen de corporativos frente a sus inversionistas.
También se denunció la labor de supuestos activistas que abogan por una defensa del medio ambiente sobre construcciones habitacionales y que aún, carentes de información puntual respecto a diferentes desarrollos, se valen de las redes sociales para una denuncia atropellada y sin sustento que busca maniatar a los empresarios de este ramo.
El sector inmobiliario atravesó a lo largo del año por terminar, fuertes turbulencias, como fueron los cambios en la demanda de espacio y la reconfiguración de los mercados de capitales y hoy, se necesita de alianzas público-privadas para abordar la magnitud de los retos que vienen en el 2025, y asegurar de esta forma una prosperidad compartida.
Pero se deben tomar medidas cuyo fin sea avanzar en esta visión como el poner freno a actitudes delincuenciales que ven en la industria inmobiliaria la ocasión para ir de grupo en grupo sorprendiendo ante esa necesidad de reforzar cuadros profesionales para competir en una oferta que en Querétaro sigue en ascenso.
El esfuerzo para ofrecer edificios y ciudades más habitables, sostenibles, resilientes y asequibles no puede interrumpirse por delincuentes que ya encontraron en el sector su modus operandi. Hay que garantizar la certidumbre en el mismo.
Debemos reimaginar el sector inmobiliario para construir un futuro mejor y no permitir el paso de redes delictivas. El Foro Económico Mundial insta a la industria y a los gobiernos a tomar medidas para avanzar en esta visión, trabajando para garantizar la creación de valor para todas las partes interesadas, incluidos inversionistas, desarrolladores inmobiliarios y prestamistas.
En la víspera navideña un entorno de paz y armonía es mi deseo para todas y todos los lectores.