Con 30 años de historia “por amor al taco”, Taquería El Califa decide salir del Valle de México y por vez primera, convencer con su potencial de sabor premium en la Ciudad de Querétaro. Es de hecho, la medición gourmet para encauzar esa ruta de expansión, prevista desde hace dos años, a otras capitales del país.
Así el tamaño del reto de su arribo a Querétaro, donde El Califa confía crecer “monarquía” hoy, con la sucursal número 20 en su red de taquerías propias. Hermann Montoya, director de la marca, recuerda inicios, cuando se llegó a pensar en la expansión bajo el esquema de franquicias, pero son tantos los detalles para seducir el paladar de comensales que decidieron crecimiento por cuenta propia.
El Califa frente al acueducto de “Los Arcos” comienza su nueva historia, pues estima que otro par de sus recintos gastronómicos bien podrían tener cabida. Y es que Hermann, en su primera charla informativa, apenas corrieron las horas de atención al público, mostraba su confianza por el paso dado en la capital queretana, “por su estabilidad económica, convivencia social y un empuje comercial e industrial que sorprende”.
En Barrio Santiago, que expertos aseguran, es único en su tipo y que representará incluso un parteaguas en el desarrollo inmobiliario de Querétaro y en el Bajío mismo, la Taquería El Califa decidió tomar mano y ser la primera oferta gastronómica en abrir puertas en esta sede comercial y residencial. Las familias y oficinistas que identificaron a la marca dieron la bienvenida apenas vieron su imagen institucional, la de círculos que me explicaron, representan distintos dobleces en la tortilla, y su marquesina tradicional en el azul, naranja y blanco que le caracteriza.
Ya al interior de la nueva sede, el trompo de pastor, una barra sobria como “centro ceremonial” a esta tradición y cutura que alimenta México, el taco; y los hay, incluso irreales, —vegetarianos— en hoja de lechuga, en tortilla de nopal, con queso vegano, en una milanesa lograda con plantas, de no dar crédito.
Hermann Montoya, detalla las promociones que vendrán, las aplicaciones en la evolución digital de El Califa, pero lo que más le enorgullece es la frescura y calidad de importación que se tendrá en el plato. Los “califans” disfrutarán de los nuevos platillos: el de sirlón y solomillo calidad prime, gaonas, bistec, en suma, un giro al taco, ya probará.
40 colaboradores directos han sido contratados, capacitados, pues el menú supera los tacos; se ofrecen desde entradas, sopas y ensaladas, hasta llegar a los postres y bebidas con jugos frescos. “Sumamos en el equipo de esta nueva unidad, queretanos que llegan con toda la actitud de trabajar con nosotros, con el objetivo de dar el mejor y mismo servicio que se reconoce en la Ciudad de México”.
La Taquería El Califa no descarta en un futuro, presencia en el plano internacional, se tiene la plena seguridad de que la experiencia del comensal será la misma que en cualquiera de sus restaurantes. “No sólo es comer unos tacos de primera calidad, sino vivir toda una experiencia”. En sucursales, las que el cliente pida, dijo satisfecho, cuando platicamos de municipios como El Marqués y Corregidora, como prometedores también. ¡Enhorabuena a El Califa!