En su estado natal, Sinaloa, Martín Alonso Santaella Osuna, Ceo de Grupo Maso, holding de empresas que sobresale por su emblemática marca, Wings Army, recibió el galardón a la Franquicia Sinaloense del 2023. El protocolo preparado para la ocasión por AFRASIN, la Asociación del ramo que crece desempeño desde la capital, Culiacán, cedió paso a esa nobleza que obliga cuando los “culichis” son anfitriones. Se mostró la camadería, los recuerdos y el convencimiento del potencial de una región como el Noroeste con sus negocios tradicionales e innovadores, siguiendo claro, la rectoría ejemplar de una franquicia premiada, de “altos vuelos”.
Santaella no contuvo el quiebre de voz, el asomo de lágrimas, cuando refirió a los asistentes que su Wings Army “se hizo con mucho corazón, con mucha sencillez y con muchas ganas de crecer” y a partir de ahí, su expansión nacional e internacional que hoy contabiliza los 215 “cuarteles” como le ha llamado a sus restaurantes. “Se puede, comenzamos pequeños y hemos crecido con mucho orgullo”. Los aplausos generosos, fueron la muestra de un reconocimiento a Martín, que la grey empresarial de Sinaloa hizo suyo. Se sentían bien representados.
Jesús García, “Chuy”, como lo identificamos sus amigos, en su calidad de Presidente de la Asociación de Franquicias Sinaloa, dijo que el creador de Wings Army, marca 100% nacional -y no como todavía algunos piensan, que es extranjera- “revolucionó el mercado de la comida rápida ofreciendo alitas de pollo con una gran variedad de salsas y una ambientación militar que invita a disfrutar una experiencia única”. Es un ejemplo de emprendimiento, innovación y liderazgo desde que fundó Wings Army, puntualizó el empresario y consultor.
Y tuvo más, consideró que Santaella Osuna “nos ha demostrado su visión estratégica, su capacidad de adaptación y su compromiso por la calidad y el servicio al cliente”. Su trayectoria es un orgullo para Sinaloa y para México, selló, con la entrega del reconocimiento en la figura del propio territorio sinaloense.
Despúes tuve la encomienda de llevar adelante un conservatorio con Martín Santaella, le propuse definir ¿cómo será la franquicia en un año de desafíos, de exigencia tecnológica y de adaptabilidad, en una ecuación nada sencilla?
Frente al propio dirigente de la Asociación Mexicana de Franquicias, Mario Briceño, de directivos de negocios sinaloenses con historia como “Helados del Pueblo”, de marcas que apuestan expansión como franquicia, L’Shrimp Sea Food, de modelos que prometen como Chandelú, restaurante, y de expertos como el Dr. Carlos A. Rios, el fundador de Wings Army eligió a la evolución como el deber primario.
Sorprendió a los asistentes cuando reveló que un joven, Mauricio, ha reforzado su cuadro directivo como paso obligado para entender al nuevo consumidor; sorprendió cuando anunció que su marca va para Francia, Holanda, España y Colombia y cuando anticipó que sus cuarteles “combatirán” con tecnología hasta en la cocina.