Ante el descubrimiento que hicieron madres buscadoras de lo que ha sido considerado un campo de exterminio en el Rancho Izaguirre de Teuchitlán, destaca la evasión de responsabilidades de algunas autoridades -que además se victimizan-, sobre el dolor de miles de familias mexicanas que han perdido o no encuentran a seres queridos.

Además de la demagogia, hay varios acontecimientos que hoy enmarcan y revelan el luto nacional. Veamos.

El inobjetable fracaso de la política criminal de abrazos y no balazos. Es un hecho -no una campaña de opositores-, la cifra que horroriza: 199 mil 970 personas asesinadas durante el sexenio del demagogo de Macuspana; sí, la más alta en la historia reciente. Y también permitió la expansión del crimen organizado.

Ahora ha sido recordado, por lo que Sheinbaum, exclamó: “Ayer creo que vi, narco presidente AMLO, ya déjenlo en paz. Todo, otra vez contra el presidente López Obrador, cuando, además, ahí, quien tenía resguardado el predio era la fiscalía estatal”. No se puede eludir que por él -en buena medida- muchas madres no pueden, aún, estar en paz.

Asimismo, la desastrosa política oficial de un gobierno desaparecido para las buscadoras. Teuchitlán expuso al oficialismo, y Sheinbaum aseguró: “No será mi Talón de Aquiles”. Opera para ello.

De acuerdo con TResearch International, si se comparan los primeros 170 días del tabasqueño con los de Sheinbaum, tenemos que el primero registró 3 mil 622 desaparecidos no localizados, mientras que la segunda lleva 6 mil 829, prácticamente un 90% más. En el sexenio lopezobradorista se registraron 52 mil 527 desaparecidos no localizados, en tanto Peña Nieto tuvo 34 mil 557, y Calderón 17 mil 054; estas cifras son las peores con las que se cuenta y pertenecen al primer sexenio de la llamada 4T. Por ello, buscadoras vigilan que no vayan a desaparecer a desaparecidos, como denunció Karla Quintana, quien, en su oportunidad, indicó que en tiempos de López Obrador la intención fue “reducir la cifra de personas desaparecidas, principalmente en este gobierno. Esto fue lo que me llevó a la salida de la Comisión Nacional de Búsqueda”.

Habría que agregar el quinto aniversario del inicio de la pandemia, con el lamentable manejo de los López (Obrador y Gatell). Basta retomar los datos de la Comisión Independiente de Investigación sobre el Covid-19: “808 mil 619 muertes en exceso (muertes por todas las causas por encima de las esperadas en condiciones normales) ubicando a México en el cuarto lugar a nivel mundial de muertes durante la contingencia sanitaria”. No obstante, López Obrador dijo: “Sí soy responsable, nada más que tengo mi conciencia tranquila…”.

Sigue vigente la propuesta del obispo de Apatzingán, Cristóbal Ascencio García, quien en 2023 señaló que AMLO, en lugar de celebrar su quinto aniversario en el zócalo, “por qué no, celebrar un día de luto, de duelo nacional”.

Junto con la indignación pública, hay que escuchar a las madres buscadoras y no minimizar la consternación por Teuchitlán, aterrador botón de muestra de nuestro México, convertido en un país de fosas clandestinas.