Como ya conocemos, a principios de este 2025, la Administración de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos implementó una medida que restringe significativamente la movilidad de los inmigrantes indocumentados dentro del país.

Según esta nueva política, aquellos que se encuentran en situación migratoria irregular solo podrán abordar vuelos si el propósito es su autodeportación o traslado entre centros de detención. Esta decisión también implica la desactivación de la aplicación CBP One, una herramienta que, desde su lanzamiento en enero de 2023, había permitido a más de 900 mil migrantes programar citas en los puertos de entrada estadounidenses y servía como método de identificación para abordar vuelos internos sin documentos oficiales, sin duda, facilitaba el movimiento de personas en situación irregular, ya sea, para trabajar, visitar a sus familiares en otros estados, o bien, tomar vacaciones.

Desde luego, antes los indocumentados podían tomar vuelos domésticos con identificaciones como licencias de conducir de ciertos estados o con un pasaporte extranjero, sin embargo, las nuevas restricciones exigen documentación válida aprobada por el gobierno de EE.UU., lo que podría complicar sus viajes internos en avión. Aún pueden viajar por tierra en autobuses o autos, pero podrían enfrentar controles migratorios en ciertas zonas, como Texas o Florida. Los inmigrantes indocumentados no pueden salir del país y volver legalmente. Si viajan al extranjero, corren el riesgo de no poder regresar debido a su estatus migratorio. Por si fuera poco, la secretaría de Seguridad Nacional, justificó la medida al afirmar que revierte una “horrenda política de la era Biden”; que permitía a migrantes indocumentados viajar en avión sin identificación oficial.

Según los datos, bajo la administración del presidente Trump, la TSA y el Departamento de Seguridad Nacional no tolerarán esta práctica, permitiendo que quienes se encuentren en el país de manera ilegal solo puedan volar si es para autodeportarse.

Esta política ha generado polémica y preocupación entre defensores de los derechos de los migrantes y expertos legales, que advierten sobre los peligros de salir del país sin asesoría legal adecuada, pues la autodeportación podría resultar en prohibiciones de reingreso que van desde 10 hasta 20 años. Además, errores en declaraciones de la ciudadanía o el uso de documentos falsos pueden derivar en la inadmisibilidad permanente al país.

Queridos lectores, toda esta situación me recuerda los castigos que impone el gobierno de China a sus ciudadanos, ya que en ese país existen restricciones de salida, es decir que, si tienes deudas impagas o estás involucrado en disputas financieras, las autoridades pueden prohibirte salir del país hasta que resuelvan sus obligaciones.

Este tipo de restricciones se aplican comúnmente en casos de deudas con bancos, evasión fiscal, impago de multas o incumplimiento de decisiones judiciales. Los tribunales pueden incluir a los deudores en una “lista negra” que limita su movilidad, impidiéndoles no solo salir del país, sino también acceder a ciertos servicios, como boletos de avión o tren de alta velocidad. ¿Lo sabían?

*Periodista y conductora

Premio Internacional de Periodismo Turístico 2022 Otorgado por la OMPT

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