Como ya sabemos, al gobierno de Estados Unidos le encanta hacer recomendaciones a sus ciudadanos, sobre todo si hay algún motivo de alerta por el que no es recomendable, según su criterio, viajar a otro país, cosa que ya no nos parece novedad, e incluso hace unos días, emitió una advertencia para quienes planean viajar a México durante el Spring Break 2025, especialmente en destinos turísticos populares como Cancún, Playa del Carmen y Tulum, en el estado de Quintana Roo. La embajada y los consulados estadounidenses en México han destacado la importancia de tomar precauciones debido a diversos riesgos asociados con estos lugares. Aunque México es un destino turístico popular, los riesgos de seguridad varían según la región. Se han reportado incidentes de violencia en áreas turísticas, especialmente durante la noche, por lo que les aconseja mantenerse en áreas bien iluminadas y concurridas, y evitar zonas aisladas después del anochecer. Las autoridades les advierten sobre los peligros del consumo de drogas y alcohol adulterado, e informa que ha habido casos de enfermedades graves, e incluso muertes relacionadas con el consumo de sustancias sintéticas o medicamentos falsificados. Además, les advierte de que la posesión y uso de marihuana, incluso para fines medicinales, es ilegal en México y puede resultar en sanciones severas.
Pero más allá de las recomendaciones que se hagan, qué es lo que realmente beneficia o perjudica a México esta temporada. Para iniciar, cabe decir que el Spring Brake aunque no tiene una fecha en específico, regularmente coincide con nuestras vacaciones de Semana Santa, y es por ello que dicho periodo representa todo un desafío para los prestadores de servicios, pues a pesar de que haya un aumento considerable en la ocupación hotelera y en la derrama económica, significa todo un reto en materia de seguridad. Entre los sucesos más presentados son excesos en el consumo de alcohol y drogas, por lo que aumenta la carga en los servicios de emergencia, se incrementan los casos de intoxicaciones, altercados y accidentes en playas y carreteras. Crecen los conflictos en la comunidad local, pues los habitantes a menudo se quejan de ruido excesivo, basura y comportamientos irrespetuosos. Desde luego para mitigar estos problemas, los gobiernos locales refuerzan operativos de seguridad y aplican restricciones en el consumo de alcohol y el acceso a ciertas zonas públicas. Además, de que el alto número de turistas también tiene consecuencias negativas para el medio ambiente, entre ellas: el aumento en la contaminación, las grandes cantidades de basura en playas y zonas recreativas, y el deterioro de los ecosistemas marinos.
Queridos lectores, no sé si les ha tocado viajar en esa famosa temporada, pero, en definitiva, no es una buena idea, la mayoría de las playas están abarrotadas, y definitivamente el servicio no es el mismo. El Spring Break es un fenómeno que refleja la dualidad del turismo moderno: por un lado, impulsa la economía y promueve el intercambio cultural, pero por otro, trae consigo problemas de seguridad, sostenibilidad y convivencia social.
