El Río Sena fue escenario para la apertura de los Juegos Olímpicos, en París 2024, se dejó atrás la típica apertura en un estadio, para llevar a cabo una inauguración la cual tiene como lema "Juegos de puertas abiertas". Al evento se presentó Lady Gaga, muy al estilo del "Moulin Rouge"-Mo- lino. Antes de dar inicio les dijo a los asistentes: "Bonsoir, bien venue à Paris" (Buenas noches, bienvenidos a París), esto y la presentación de la banda de death metal francesa, Gojira, fue lo más épico de la esta ceremonia, porque hicieron una representación con su música, de los tiempos de la revolución al presentar a la reina María Antonieta antes de ser decapitada, pero con todo esto: ¿sabías que en un inicio no solamente se premiaba la parte deportiva, sino también el arte formaba par te de esta justa?
En 1912, se llevaron a cabo los Juegos Olímpicos en Estocolmo, Suecia. Ahí el arte es- taba considerado en la premiación de los Juegos, disciplinas como la música, arquitectura, literatura, pintura y escultura eran parte importante de dicho evento; fue Pierre de Coubertin-ganador de la medalla de oro en "literatura"-, quien se convierte en el fundador de los Juegos Olímpicos modernos, con el objetivo de buscar que los seres humanos tuvieran una fuerte conexión en mente y cuerpo, consideraba importante incluir la parte artística con la deportiva; sin embargo, esta idea original de combinar estas dos, únicamente fue posible hasta el año de 1948 en los Juegos Olímpicos de Londres, tomando en cuenta que de 1940 a 1944 se suspendieron a causa de la Segunda Guerra Mundial.
Durante estos años las medallas que se entregaron a los artistas participantes fueron a consideración muy subjetiva del jurado, es decir, si el jurado consideraba que su trabajo no estaba a la altura de la contienda, a lo más, se daba una medalla de bronce a alguno por disciplina. Lo único que se pedía era presentar trabajos inspirados en el deporte.
Walter Winans fue uno de los escultores ganadores de medalla de oro con su obra titulada "An American trotter"-el trotón estadounidense-, y uno de los títulos olímpicos de arte, en la rama de literatura fue la finlandesa Aale Tynni, ella fue la única mujer en haber ganado un título olímpico en literatura, en Estocolmo de 1912.
Para los Juegos de Amberes de 1920, la ganas de participar en las disciplinas de las artes no llamó mucho la atención de los espectadores; sin embargo, para París de 1924, el arquitecto, Paul Landowski fue un súper hit, ganó el oro olímpico por la escultura de un boxeador y hoy podemos reconocerle más por ser el creador de una de las siete maravillas del mundo moderno con el Cristo Redentor en Río de Janeiro.
Lamentablemente, las contiendas artísticas dejan de aparecer para 1954, por la falta de profesionalismo en el trabajo de las áreas artísticas, dejándolas a un lado, y con ellos se hace más fuerte el área deportiva.
Para estas olimpiadas, en París, se presentó a inicios de este mes una escultura en bronce titulada Salon, del artista Alison Saar, en ella vemos a una mujer sentada en una roca volcánica, sosteniendo en su mano derecha unas ramas de olivo y en la otra tiene levantada la llama dorada, de manera iconográfica representa el símbolo de paz y tregua ante cualquier tipo de hostilidad. Esta obra fue elegida por el COI (Comité Olímpico Internacional) y el Ayuntamiento de París para dar testimonio del legado de estos Juegos Olímpicos, que estarán del 26 julio al 11 de agosto, así como para los Paralímpicos.