Hace unos días el Presidente Municipal de Querétaro anunció el remplazo de Jessica Moncada al frente de Secretaria de la Mujer y la llegada de la Maestra Malena Guadarrama. En cuanto la noticia se conoció comenzaron las felicitaciones para la nueva Secretaria y los "vaya, ya era hora" para el gobierno municipal. Tengo que admitir que yo fuí una de muchas que celebran el cambio.
No disfruto para nada señalando a otras mujeres. Considero que ya bastante tenemos con los hombres que constantemente desprestigian, minimizan y cuestionan nuestro trabajo como para echarle leña a ese fuego. Pero como ya he dicho antes, estoy convencida de que no podemos quedarnos calladas ante las acciones de mujeres que violentan y discriminan a otras mujeres y que buscan dañar a toda costa. Tampoco ante mujeres que fincan sus lealtades con hombres en el poder y se dejan utilizar en contra de otras mujeres, y aún menos frente a las que no entienden que los derechos humanos son derechos de todas y desde sus prejuicios y privilegios actúan de manera regresiva para limitar a otras el acceso a oportunidades.
Desafortunadamente, muchas mujeres que acceden al poder desde prácticas patriarcales ven al feminismo y sus exigencias como antítesis de sus posturas personales. Ellas causan mucho daño, especialmente a las más vulneradas y discriminadas y a las mujeres víctimas de violencias graves que requieren de más atención.
Las mujeres que ocupan cargos públicos, como todas las mujeres, son diversas y plurales. Muchas de ellas, desde sus convicciones políticas y personales, reconocen que las diferencias deben servir para multiplicar, porque en la lucha por los derechos de las mujeres no podemos darnos el lujo de dividirnos. Por eso, las titulares de los organismos responsables del avance de la igualdad sustantiva y la erradicación de la violencia de género, deben ser mujeres comprometidas con llevar a la política pública, el estandarte que miles de mujeres por siglos han enarbolado en la lucha por nuestros derechos.
En el Municipio de Querétaro trabajan muchas funcionarias capaces, comprometidas y dispuestas a poner todo para lograr una sociedad cada vez más justa para las mujeres y niñas. Espero que con la llegada de la nueva Secretaria el gobierno municipal ahora si les brinde el apoyo que les faltó en los últimos ocho meses para poder hacer su trabajo. Lo que si puedo asegurarles a todas ellas es que seguirán contando con mujeres que, desde organizaciones de la sociedad civil, siempre estaremos listas para apuntalarlas.
Male Guadarrama ingresa a la lista de funcionarias responsables de alcanzar la igualdad sustantiva y la erradicación de la violencia contra mujeres y niñas en nuestro estado. Para la nueva Secretaria mis parabienes y la seguridad de mi compromiso de sumar, porque cuando funcionarias y activistas cerramos filas en pro de las mujeres y niñas, el futuro siempre pinta mejor para todas nosotras.
