Para nadie es secreto la situación que vive Morena a nivel nacional y qué decir de su realidad en nuestro estado, en más de una ocasión este espacio ha brindado diferentes datos y percepciones del desorden que existe al interior de la primera fuerza política en México; sin embargo, las preferencias por el partido en el gobierno no descienden a nivel federal.
La empatía que la ciudadanía tiene por la Cuarta Transformación sigue vigente y mes con mes los números respaldan el arrastre electoral que tiene Morena prácticamente en todo el territorio nacional, aunque siendo claros esto no se debe a la dirigencia que encabeza Mario Delgado, personaje cuyo enfoque está situado en “tenderle la cama” al actual titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, para que éste avance en sus aspiraciones de ser quien encabece el proyecto en 2024.
Desafortunadamente para la militancia, el actuar de Delgado ha hecho que se pierda la confianza en lo que el partido representa de origen, sus “descuidos” han hecho que personajes impresentables se sumen a las candidaturas y por consecuencia encuentren el rechazo de las bases y por consecuencia la derrota en las urnas, debido a que los votantes no ven en ellos una auténtica representación de los ideales del partido fundado por el actual Presidente de la República.
De lo que pasa en Querétaro, lo mejor es no decir nada, si no fuera por algunos representantes populares que con su trabajo ponen el ejemplo de lo que hay que hacer cuando se está en un espacio de decisión, el nombre de Morena en la entidad estaría más desprestigiado que lo que actualmente está como consecuencia del proceso electoral pasado que estuvo plagado de irregularidades. Sin embargo, contrario a lo que se puede pensar, la ciudadanía tiene confianza en el proyecto que desde hace varios años propone el partido guinda, esto gracias al trabajo de López Obrador, labor que hasta el momento ha sido suficiente para que la preferencia electoral no disminuya para su partido.
En esta sintonía se encuentra el respaldo ciudadano que ha tenido la iniciativa de revocación de mandato, el pueblo mexicano está consciente del poder que tuvo en 2018 para evitar que existiera nuevamente un fraude electoral, la participación de ese año dejó un precedente y hoy más que nunca existe la convicción de seguir sumando a la democratización de la vida pública de México. El próximo 20 de abril los mexicanos podremos decidir si AMLO continúa en su cargo, fijando un mecanismo que fomenta la participación ciudadana y fortalece la democracia en nuestro país, al mismo tiempo que se hace efectivo el uso de una herramienta que permitirá que cada tres años el titular del Poder Ejecutivo se someta al escrutinio ciudadano, en palabras obradoristas, “El pueblo pone, el pueblo quita”.
Es momento de ver la fortaleza de la nueva oposición, ahora sí nos daremos cuenta si el descontento que tanto mencionan es una realidad o simple y sencillamente es parte del circo de desinformación al que le han apostado desde el inicio de la gestión del actual Presidente, por su lado Morena está más que obligado a demostrar músculo político en un ejercicio que servirá como parámetro para todos aquellos interesados en la jornada del 2024. Tiempo al tiempo.