Ignoro si Guadalupe Murguía Gutiérrez, la futura secretaria de Gobierno tenga pesadillas donde un fantasma recorre Querétaro, el fantasma del comunismo; pero lo que sí debe saber la próxima encargada de la política estatal es que la Unión Soviética desapareció en 1991, que China es más capitalismo de Estado que socialismo y que Vox, partido de ultraderecha española y con quién firmó una carta para combatir el comunismo, es una organización misógina y homofóbica que va en contra de los derechos humanos.
En política, decía Jesús Reyes Heroles, la forma es fondo y esto lo debería saber muy bien la futura secretaria de Gobierno estatal, que este fin de semana estuvo en el ojo del huracán por haber firmado el Pacto de Madrid que impulsa Vox, en donde además de promover una agenda antiderechos humanos y protofascista, también manejan ideas ridículas y obsoletas como la lucha contra el comunismo y lo que llaman “ideología de género”.
Esto es peligroso porque el mensaje que manda la próxima encargada de la política estatal es que, bajo el mandato de su jefe, el gobernador electo Mauricio Kuri González, se seguirá en esa línea antiderechos humanos y de promoción de odio a la comunidad LGBT+, de criminalización del aborto y revictimización de las mujeres que sufren violencia. ¿Ese es el mensaje que quiso enviar la futura secretaria?
¿O es que acaso fue un error y no calculó lo que sus acciones comunican políticamente? Esto es igual de grave que lo anterior porque estaríamos ante la situación de que quien manejará la política estatal fue víctima de su ingenuidad política y pensó que acudir a firmar con Vox era un evento más sin medir las consecuencias de sus acciones.
Si quien maneja los hilos políticos del estado se comporta con tal ingenuidad, sin duda le provocará más problemas que soluciones a su futuro jefe. A Murguía le faltó astucia para hacer una lectura política correcta y, por ello, ya echó a perder semanas de trabajo de cabildeo para el futuro gobernador.
Al interior del PAN se ha generado controversia por esa reunión y algunos ya piden la cabeza del coordinador de la bancada panista del Senado, ¿sucederá aquí lo mismo con la futura secretaria? ¿O saldrá la propia Murguía a dar una explicación?
Lo que parecía una buena táctica de Kuri de ir nombrando su gabinete por goteo, empieza a mostrar sus debilidades porque los futuros secretarios quedan expuestos antes de tomar posesión y asumir el cargo sin legitimidad, como es el caso de Guadalupe Murguía quien por acción u omisión cometió una enorme torpeza política al reunirse con Vox.