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Ayer martes 7 de junio se entregó el Premio Estatal de Periodismo en Querétaro.
La Secretaría de Cultura, a un costado de Santa Rosa de Viterbo, fue la sede de la ceremonia, donde los integrantes de la Asociación de Periodistas del Estado de Querétaro (APEQ), la Asociación de Cronistas Deportivos de Querétaro y la Asociación de Editores Independientes del Estado de Querétaro reconocieron a los compañeros del gremio.
Facundo Ugalde González, expresidente de la APEQ y presidente del Comité Organizador del Premio Estatal de Periodismo 2022, dio la bienvenida:
“Es una reunión de amigos a la que quisimos convocar, invitar con quienes convivimos cotidianamente, con quienes día a día vemos temas de trabajo, y hoy no los invitamos a trabajar, a que nos acompañen a esta ceremonia para reconocer a los compañeros que presentaron trabajos para este certamen”, dijo mientras señaló que desde hace 11 años no se realizaba.
Luego de la bienvenida, se reconoció a quienes han entregado su vida al periodismo.
Por trayectoria periodística se reconoció a Juan Trejo Guerrero, Manuel Paredón, Teresa Valdez Hernández, Eloy Caloca, Jaime Zúñiga Burgos, Rogelio Estrada Pacheco, José Luis Almada Gallardo, Gilberto Ledezma Ledezma, Benjamín Álvarez Esteban, Antonio Sánchez Hernández, José Alberto Herrera Pérez, Edgardo Cabrera Delgado e Israel Luna Cabrera.
En especial se dio un reconocimiento póstumo a Coco Ontiveros, Juan Álvaro Zaragoza Lomelí y Mariano Ugalde García.
Se dieron menciones honoríficas a estudiantes de periodismo y directores de medios de comunicación.
Luego, se dieron los premios en las diferentes categorías: por Fotografía, Martha Helena Flores Jiménez; por Mejor Reportaje Periodístico Vía Redes Sociales, Claudia Ivonne Hernández Torres y Beatriz González Galván; Nota más Oportuna para Televisión, Heidi Wagner; Mejor Entrevista Radiofónica, Aurelio Peña Tavera; por Mejor Nota Periodística Cultural y Mejor Trabajo de Divulgación e Información Académica e Innovación científica y Tecnológica, Fernando Jaime Lugo Martínez; por Caricatura, José Raúl Mendoza Velázquez; y Mejor Trabajo de Camarografía Periodística, Erik Bernardo Robledo.
Mejor Entrevista en Deportes, Gonzalo Adrián Reyes García y José Antonio Romero de la Torre; Mejor Reportaje en Deportes, Itzel Feregrino Aguilar; Crónica, Jesica Salvador Sánchez; Mejor Reportaje Periodístico por Televisión, Yoheme Pomares; Mejor Trabajo Periodístico Universitario, Rodrigo Mancera Venegas, y como segundo lugar, Lorena Olvera Reséndiz, ambos de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ).
Después se reconoció a Patricia López Nuñez, quien se llevó la ovación de los presentes, de sus compañeros, de quienes la conocen de toda una vida dedicada a la comunicación.
Le entregaron sus reconocimientos, recibió las felicitaciones de la rectora de la UAQ, Teresa García Gasca, de Facundo Ugalde, de Paul Ospital Carrera y de los representantes de las autoridades locales que se encontraban presentes.
Patricia se dijo contenta y agradeció a todas las personas, a todos compañeros que ha conocido a lo largo de su carrera, porque a todos, añadió, les ha aprendido algo. Luego la reportera estaba del otro lado del micrófono, de la grabadora.
Lució contenta con su reconocimiento, con el trabajo de toda una vida.
La entrevistaron diferentes medios de comunicación, sus compañeras y compañeros, sus amigas y amigos. Ella respondió con una sonrisa en el rostro las preguntas. Posó también para las fotografías.
Los demás galardonados convivieron con sus compañeros, se tomaron fotos y selfies. Después de dos años de pandemia muchos se volvieron a encontrar; platicaron de cómo están, de cómo han pasado los últimos tiempos.
La ceremonia sirvió como pretexto para saludar a los compañeros y amigos. Un saludo con el puño cerrado, un abrazo tímido, un “hola” con sana distancia. Todo se valía entre compañeros de los medios.
El velaria de la Secretaría de Cultura se comenzaba a despejar. Los comunicadores volvían al trabajo, a escribir sus notas, a cortar sus audios, a elegir fotografías, a actualizar redes sociales.
La labor de informar no se detuvo para aquellos como los galardonados, los nuevos y los experimentados, los de muchos años y los de poco tiempo, pero por cuyas venas, como decían los antiguos maestros del periodismo, ya corre tinta y no sangre.
