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De acuerdo con la Entidad Superior de Fiscalización del Estado (ESFE), del primero de julio al 31 de diciembre de 2011, en Peñamiller se presentaron 42 partidas sobregiradas las cuales ascendieron a 7 millones 635 mil 903 pesos. Esa situación propició que se ejercieran más recursos de los disponibles.
El diccionario contable describe al sobregiro como los pagos que se hacen y que exceden el saldo del cuentahabiente.
“En virtud de haber presentado 42 partidas sobregiradas por un monto total de 7 millones 635 mil 903 pesos 2 centavos, en su estado del Ejercicio Presupuestal, ejerciendo recursos y omitiendo contar con suficiencia presupuestal”, dice el informe de la ESFE.
Dentro del documento de la ESFE se manifiesta que este organismo detectó que se efectuó el traspaso de recursos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social Municipal (Fism) 2011, hacia la cuenta bancaria de gasto corriente, por la cantidad de 194 mil 674 pesos.
Además, dentro de las observaciones de la entidad se manifiesta que se omitió reintegrar los recursos, así como los rendimientos financieros correspondientes; siendo que FISM es destinado a los municipios con mayor magnitud y profundidad de pobreza extrema.
En este mismo sentido, la entidad refiere que se ejercieron 740 mil 63 pesos del FISM en obras que no fueron en beneficio de la población con mayor grado de marginación.
“Se ejercieron recursos del Fism 2011 por un monto de 740 mil 63 pesos 22 centavos, en rubros y sectores de la población distintos a lo establecido en la Ley de Coordinación Fiscal”, dicta el informe.
Aunado a esto, el ayuntamiento de Peñamiller incurrió en prácticas que van en perjuicio de la obra pública, ya que de acuerdo con la ESFE no garantizaron los principios de economía, eficacia, eficiencia, imparcialidad y honradez que aseguraran las mejores condiciones para la convocante, en cuanto a precio, calidad, financiamiento y oportunidad, en las edificaciones públicas.
Es por esto que se presentaron deficiencias en la supervisión y control de los trabajos que derivan en un pago indebido a favor de las empresas contratistas por un monto de 47 mil 135 pesos.
Ante estas circunstancias la ESFE recomendó al municipio de Peñamiller que trabaje en hacer un padrón de proveedores y por separado y una lista de contratistas.
Además, la entidad fiscalizada sugirió que se implementen los mecanismos que permitan dar seguimiento a los acuerdos aprobados por el ayuntamiento a fin de vigilar su debido cumplimiento.
Lo anterior tomando en cuanta que, derivado de la revisión a las actas del ayuntamiento números SGHA/MP/PQ/54 y 55 —que tienen las fechas 26 de agosto y 16 de septiembre de 2011 respectivamente— se identificaron diversas omisiones e inconsistencias en la autorización de los acuerdos.
