Este jueves, en sesión solemne de la 58 Legislatura que se efectuó en el Teatro de la República, Francisco Domínguez Servién tomó posesión como gobernador constitucional del estado de Querétaro para el periodo 2015-2021.
A las 10 de la mañana con 17 minutos, Francisco Domínguez Servién rindió protesta como gobernador de Querétaro, después de recibir la Constitución Mexicana de manos de Jorge López Portillo Tostado, ahora ex mandatario interino tras sustituir a José Calzada Rovirosa el 27 de agosto.
El gobernador Domínguez Servién dijo que hoy inicia en el estado un proceso histórico que será un referente a nivel nacional.
Afirmó que la historia de México invariablemente está ligada a Querétaro, ya que aquí germinó la semilla de la insurgencia y aquí se restauró la República, además de haberse reunido “una generación joven y revolucionaria, visionaria, que redactó la Constitución de 1917, la que funda las bases del México contemporáneo”.
Indicó que la sociedad queretana demanda un gobierno honesto, franco y profesional, que construya y transforme de manera responsable a la entidad: “No venimos a enmendar todo. Querétaro no puede ni debe inventarse cada seis años. Se mantendrá, ampliará y perfeccionará todo lo que ha traído beneficios a nuestro estado, pero no tengan duda, también cambiaremos para mejorar”.
Aseguró que el gobierno que encabezará será cercano a la gente y que buscará solución a sus problemas escuchándolos directamente. Expuso que su administración rendirá cuentas por convicción y no por obligación: “Que quede claro, pondremos a la luz todo aquello que estaba en la oscuridad. A partir de hoy, no habrá un solo espacio para la deshonestidad, no habrá perdón para el pasado, no habrá oportunidad para el abuso en el futuro. Gobernaremos con el ejemplo (…) Que lo sepan todos, enterramos la corrupción hoy, para siempre”.
Reiteró que no tolerará los actos de corrupción que realicen los funcionarios públicos, por lo que avisó que hará cumplir la ley. Pidió a los alcaldes que entraron en funciones ayer, que se unan a esta política anticorrupción para que se envíe un mensaje contundente a todo el país “que en Querétaro comienza la renovación profunda de la ética pública de la nación. Atento el que tenga que estar atento, no habrá fuero político para nadie”.
Señaló que en su gobierno no tendrá cabida el autoritarismo y prometió escuchar la abiertamente la crítica, respetando la libertad de expresión de los ciudadanos queretanos.
Dijo que a pesar del desarrollo que ha tenido la entidad en los últimos años y que lo han posicionado de forma positiva a nivel nacional e internacional, aún existe mucha desigualdad.
“De cada 100 queretanos 34 viven en pobreza, de cada 100, 33 están en situación de vulnerabilidad, la pobreza les acecha. Uno de cada 10 queretanos no tiene nada que comer. Estos datos me avergüenzan y me duelen. Es el momento de acabar con la desigualdad”, demandó Domínguez Servién.
Llamó a trabajar de manera coordinada con los poderes Legislativo y Judicial, y con los organismos autónomos e insistió que el gobierno que encabezará será austero y responsable para recuperar la salud financiera.
Aseguró que en el estado existe un déficit sin precedentes que alcanza los 650 millones de pesos.
