La asociación civil Amigos del río San Juan alertó sobre la muerte de 15% de árboles en una extensión territorial de un kilómetro ubicada a un costado del afluente; la organización presume que altos niveles de contaminación en el agua estén provocando el deterioro de la vegetación.
Adriana Díaz Barriga Pardo, secretaria de la asociación civil, detalló que la afectación a los árboles se ha detectado en la zona del afluente que va de la autopista México-Querétaro al parque de los Abuelos.
“En el río San Juan están muriendo árboles permanentemente sobre todo en la zona urbana cercana al afluente, lo que pretendemos con el apoyo de la UAQ es una batería de suelo que consiste en sacar muestras del terreno, llevarlas al laboratorio y detectar por qué están muriendo los árboles”, dijo.
De acuerdo con datos de la Comisión Nacional del Agua, en el río San Juan se han detectado residuos orgánicos, industriales y metales pesados, que evidencian la contaminación del afluente por descargas de diversos sectores.
“La Conagua da cuenta de lo que se ha detectado en el río por tramos, se ha detectado mucha carga de residuos orgánicos principalmente, que se refiere a descargas urbanas seguramente, en algunos tramos se detectó presencia de metales pesados, la contaminación no sólo es industrial, es de residuos habitacionales”, afirmó.
Amigos del río San Juan ha propuesto al gobierno municipal un proyecto de rescate que representaría una inversión de 3.5 millones de pesos y que incluye el estudio previo de la calidad del agua para detectar el tipo de residuos en el afluente.
Díaz Barriga Pardo, también especialista egresada de la Universidad Autónoma de México, no descartó que la muerte de los árboles se debe a alguna descarga industrial que no ha sido controlada eficazmente.
Explicó que la remediación de altos niveles de contaminación requiere procedimientos que llevan más de 30 años de tiempo, razón por la cual alertó a las autoridades municipales a intervenir a la brevedad para conocer la causa exacta del daño a los árboles.
La asociación plantea al municipio un proyecto integral de rescate, que además de los estudios para determinar el tipo de contaminación, se generen espacios verdes aprovechando las riquezas de la zona, entre estos la zona de El Barrio de la Cruz, para crear un parque ecológico y arqueológico.
También proponen la creación de represas filtrantes para aprovechar el agua de la presa de Lomo de Toro y sanearla al llegar al río.
Adriana Díaz aseguró haber trabajado ya en un programa de rescate del río en El Pueblito, donde se pudieron salvar especies de la zona, y que ha sido considerado como un caso de éxito por la Semarnat.
Agregó que en el municipio de San Juan hay empresas interesadas en el rescate del río que están dispuestas a contribuir en el proyecto que presentamos y cumplir con toda la normatividad de la Comisión Nacional del Agua para evitar más contaminación al afluente.
Para el siguiente año, la presente administración espera un recurso estatal aproximado de 17 millones de pesos para dar continuidad a la segunda etapa del rescate del río San Juan.