El diputado federal priísta Braulio Guerra Urbiola promueve por medio de una iniciativa la protección del medio ambiente —por las afectaciones que genera el cambio climático— que se integre al eje de la política exterior mexicana para que este principio se convierta en mandato y se cumpla sin importar quién nos gobierne.
Explicó que esta iniciativa ya la presentó hace algunos meses en San Lázaro, donde ya se aprobó. El siguiente paso para hacerla ley es que el Senado la ratifique y después hagan lo mismo los congresos estatales.
Enfatizó que conoce el tema, debido a que su tesis de doctorado está relacionada con el cambio climático, “fueron cuatro años de investigación, había poco material en 2014”.
La aprobación de esta iniciativa permitirá que México, sin importar “quién lo gobierne, qué partido o persona, ya sea de derecha izquierda, centro, ideas radicales o extremistas, esto se convierta en un mandato de principio constitucional a seguir y también en una política de Estado”.
Asimismo, subrayó que su propuesta busca que en México no suceda lo que pasó en Estados Unidos con Donald Trump, “en donde la derecha extrema en función de incentivar la economía, impulsar la industria, mejorar el desempeño empresarial, hay que contaminar más y disminuir la regulación de emisiones de gas invernadero”.
La Comisión de Derecho Internacional de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), refirió, ha dicho que el derecho al medio ambiente y a combatir el cambio climático no depende de un pacto entre países, sino que son derechos internacionales.
Destaca que la atracción de inversiones no debe estar peleada con un estricto control de emisiones contaminantes, como sucede en Querétaro, entidad donde la industria manufacturera es uno de los principales motores de la economía, pero además no se promueve la llegada de empresas que representen un foco de contaminación.
“Está comprobado aquí en Querétaro que se puede combinar una buena empresa y una buena industria con el cuidado al medio ambiente, es perfectamente compatible y viable. El tener controles de cuidado no disminuye la productividad y competitividad”.
En Querétaro hace falta que se le den dientes a la Procuraduría Estatal del Medio Ambiente para que sancione a las empresas y particulares que contaminen.
“Hoy la Procuraduría no tiene dientes, sólo puede emitir recomendaciones y planteamientos para que las empresas y los particulares tomen ciertas medidas, sin embargo, continúan violentando estándares ambientales. Ya se creó la institución, tiene presencia, emite recomendaciones, emite dictámenes, pero falta ponerle la tuerca al tornillo”.
Querétaro, dice, tiene un perfil geográfico especial que le permite contar con radiación solar por arriba del 6%, lo que genera la llegada de empresas y particulares que ofrecen energía solar tanto para el consumo industrial como doméstico.