La Iglesia queretana exhorta a los padres de familia a trabajar en la cultura de prevención sexual en sus hijos, lo que llevará –aseguró-, a fortalecer la familia y evitar los embarazos no deseados, así como el aborto, opinó el vocero de la Diócesis de Querétaro, padre Saúl Ragoitia.
Hoy la problemática, comentó que es un tema que causa conflicto entre jóvenes y adolescentes. Pues los embarazos no planeados, y a temprana edad, conllevan en varias ocasiones el aborto. Circunstancias de riesgo que se evitan si se cuenta con una cultura de prevención, y una educación real de la sexualidad.
“Esto lo tiene que asumir en primer momento los papas, en donde la sexualidad no es una cuestión meramente bilógica o genital, hablar de la sexualidad humana, es hablar de toda la persona humana”, aseguró el vocero de la Diócesis en Querétaro.
Contextualizó que el posible incremento de embarazos no deseados en adolescentes y abortos, es debido a la falta de la cultura de la prevención, de educación y a la pérdida de valores, así como en gran parte a la mentalidad anticoncepcionista, que “aparentan” ser filosofías o políticas de prevención de enfermedad, pero también promotoras de la promiscuidad.
“Hay factores que hay que observar como sociedad y quienes tienen la responsabilidad respecto a los adolescentes son los papás, y ahorita luchar contra una sociedad egoísta donde todo el ambiente sexual está a flor de piel, que difícil para los papás enseñar a los hijos, muchos de ellos se ven en la necesidad de caer en lo pragmático, que es el uso de la píldora, condón, anticonceptivo, pero esto no es educativo, es una cuestión pragmática”, lamentó.
A decir del padre Saúl Ragoitia, no es suficiente que los padres o la sociedad de a conocer la utilización de anticonceptivos para prevenir enfermedades o la concepción, sino en profundizar realmente en la educación entorno a la sexualidad y como prevenir estas situaciones de manera real.
“Es como en la calles, que quieren generar una conciencia vial de tránsito, no basta con poner topes, no basta un semáforo, se requiere una cultura, y hoy es de lo que se está adoleciendo en la sociedad, no hay una cultura de prevención entorno a la sexualidad, en torno al tema de la familia, hoy urgen esas acciones, además de que estamos percibiendo un deterioro del concepto familiar”.