Más Información
El invernadero localizado al interior del penal femenil de San José el Alto sirve para la producción de frutas y legumbres utilizadas en el consumo interno. Dos de las reclusas que tienen mayor condena, son las encargadas de mantener con vida las plantas.
Las diferentes plantas de temporada son cultivadas y cuidadas por tan solo dos internas que recibieron la capacitación de otras reclusas que ya cumplieron su condena. Actualmente se plantan jitomates, una vez terminada esa producción se iniciará el cultivo de lechugas, chiles y el próximo año se iniciara con las orquídeas.
Karina, quien purga una condena de 50 años por homicidio, es una de las encargadas del cuidado del invernadero.
“Nos dedicamos a las plantas y las tratamos con mucho cariño, se les pone alimento, se tienen que amarrar para que no caigan. Los jitomates son de mucha agua, cada una de las plantas requiere de 12 hojas en cada racimo para tener una buena producción, esto no tiene mucha ciencia. Yo fui invitada a unirme al proyecto del invernadero por la directora del penal. Originalmente eran cinco personas y ahorita solo quedamos una compañera y yo”.
Con pasión a lo que hace esta mujer de tan solo 35 años es la encargada de supervisar el crecimiento, desarrollo y cultivo de las plantas que ahí viven.
Durante este año la cosecha de jitomates fue de 30 kilos, pero en años anteriores ha superado los 60.
El nuevo plan considera lechugas, jitomates y chiles, aún desconocen cuanto será la producción.
