El diputado Eric Salas González señaló que la dieta de los legisladores tuvo un ajuste del 8.7% en 2018, sin embargo, éste fue para pagar el Impuesto Sobre la Renta que era cubierto por la Legislatura y que se derivó de la Reforma Fiscal aprobada a finales de 2018.
“Ganamos como cuando entramos, la diferencia es que el Impuesto Sobre la Renta era subsidiado por la Legislatura pero ya no”.
Al preguntarle sobre el supuesto aumento de la dieta que se habrían autorizado meses atrás, el también presidente de la Comisión de Planeación y Presupuesto aseguró que no se aumentaron nada ni nadie lo ha solicitado, únicamente se hizo el ajuste que mencionó.
Explicó que la dieta que ellos perciben es de 47 mil pesos mensuales, pero que con la Reforma Fiscal se tuvo que hacer un ajuste de 7 mil pesos en sus percepciones económicas para poder pagar el ISR, con lo cual la dieta queda en 54 mil pesos, los cuales ya contemplan el pago del impuesto.
“Ese fue el ajuste administrativo al que nos obligó el SAT pero te puedo decir que nosotros tenemos el mismo apoyo económico desde hace tres años. Con ese ajuste ahora son 54 mil pesos y ahora nosotros pagamos el ISR”.
Eric Salas indicó que esta medida implementada ayuda a que se puedan transparentar los ingresos de los diputados y al mismo tiempo revisar que coincidan con los egresos de cada uno de ellos.
No habrá bonos ni finiquitos.
Por su parte, el presidente de la Junta de Coordinación Política, Luis Gerardo Ángeles, aseguró que la anterior Legislatura se aumentó el sueldo, sin embargo, señaló que dentro de las primeras acciones que llevaron a cabo fue que se bajaron su dieta. Al preguntarle si algún legislador ha solicitado a la Junta de Coordinación Política algún tipo de bono o finiquito por concluir con su labor en la 58 legislatura, Ángeles Herrera dijo que “aquí no existen bonos ni finiquitos, a mí nadie me lo ha pedido y pues mejor que no los pidan”