En el marco de solidaridad por los recientes acontecimientos en Iguala, Guerrero, alrededor de 400 integrantes de la Unidad Felipe Carrillo Puerto (UFCP) y del Frente Independiente de Organizaciones Sociales (FIOS) marcharon para exigir que se esclarezcan los hechos por los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos el pasado 27 de septiembre; y que se haga justicia por los asesinatos en México.
Los inconformes acudieron al Palacio de Gobierno para solicitarle al gobernador del estado, José Calzada Rovirosa, que haga llegar su petición al Presidente de la República, Enrique Peña Nieto.
El representante de FIOS, Rosalío Olguín Olvera, expuso el motivo de la manifestación y pidió resolver esta situación, “que ha afectado a miles de familias de México”.
“Hay una indignación en todo el país por los últimos acontecimientos; se ha recrudecido la represión contra el pueblo, sobre todo contra los estudiantes de Guerrero”, señaló Olguín Olvera.
Detalló que por medio de la coordinadora nacional de su federación se ha buscado ejercer presión al gobierno para endurecer su posición ante el tema del narcotráfico.
“Ya habían muertos desde el gobierno que declinó, la situación es que el presidente está enseñando su verdadero rostro desde la represión de Atenco, lo cual ha seguido”, lamentó el líder.
Por tal motivo, una de las peticiones que realizó fue la destitución de Enrique Peña Nieto, por la ingobernabilidad que aseguran existe en el país.
Asimismo, calificó la incapacidad del gobierno actual de hacer respetar los derechos constitucionales para una “vida en paz”.
“Una opción puede ser la destitución del Presidente de la República, por que el estado se está volviendo ingobernable, el problema lo vemos en la cuestión del narcotráfico, que creció tanto que muchos funcionarios de gobierno posiblemente están involucrados; en el caso de la represión que se ha dado en Michoacán, Guerrero y Tamaulipas es un estado casi desierto”, sostuvo.
Desconocieron la versión el pasado viernes del procurador General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam, quien declaró que los 43 normalistas desaparecidos fueron ejecutados y quemados por grupos criminales.