La obligatoriedad de contratar un seguro para quienes poseen un vehículo es una de las principales propuestas que tienen las reformas a la ley estatal de tránsito.
En la iniciativa presentada por el Poder Ejecutivo Estatal se propone en el artículo 37 que “todo vehículo que transite por vías públicas del estado deberá contar con tarjeta de circulación, el engomado correspondiente, así como una póliza de seguro”.
El documento añade que dicha póliza de seguro será “contra daños a terceros que pudieren ocasionarse en sus bienes o personas”.
Entre los considerandos para impulsar esta propuesta, se debe a la frecuencia de accidentes de tránsito y la gran circulación de vehículos. Es por lo anterior que en países como Japón, desde 1914, o España, desde 1962, contemplan la obligatoriedad de que todo automóvil cuente con su respectiva póliza de seguro.
Además se explica que en el continente americano, países como Costa Rica, Chile y Brasil, contemplan dentro de sus legislaciones la contratación obligatoria de un seguro para permitir la circulación de los vehículos.
En el ámbito interno, es posible mencionar a entidades federativas que ya contemplan en su ley o reglamento de tránsito respectivo, la necesidad de que los vehículos automotores de uso particular, cuenten con póliza de seguro de responsabilidad civil vigente, que ampare al menos la responsabilidad civil por daños a terceros en su persona y en su patrimonio
Dichas entidades son: Chihuahua, Ciudad de México, Estado de México, Morelos, Nayarit, Nuevo León, San Luis Potosí, Sinaloa, Tabasco, Tamaulipas y Yucatán.
El subsecretario de Gobierno estatal, Víctor de Jesús Hernández, explicó que en la iniciativa de reforma a la ley de tránsito se propone crear un registro estatal de tránsito, herramienta que permitirá verificar a la Secretaría de Seguridad Ciudadana si se cumplió o no con la disposición de contar con el seguro vehicular.
Puntualizó que a través del trabajo legislativo que se lleve en la Comisión de Seguridad Pública y Protección Civil se podrá construir una propuesta de sanciones para quienes no cumplan, si se aprueba, con esta obligación de adquirir el seguro contra daños a terceros.
Recordó que la obligatoriedad del seguro vehicular que protege contra daños a terceros para quienes circulan en carreteras federales se implementó inicialmente desde el 23 septiembre de 2014 para los autos de 2011 y posteriores, cuyos precios sean superiores a 186 mil 700 pesos.
“Este seguro ha venido operando de manera progresiva y la medida dice que todo vehículo que circule para 2019 en carreteras federales debe de tener una póliza de manera obligatoria, por esa razón creemos que estamos en condiciones de imponer la obligatoriedad”, señaló el subsecretario.
La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), abundó que a partir de enero del 2015, todos los vehículos 2008 y posteriores, con valores de 162 mil pesos para arriba deben estar asegurados. En 2016, se incluyeron modelos 2005 y subsecuentes; en 2017, a partir de modelos 2000 y en 2019 todos los autos deberán contar con dicha cobertura.
De acuerdo con información proporcionada por la AMIS, el costo anual de este tipo de seguro, tiene un costo que fluctúa entre 300 y 400 pesos, el precio es variable, todo depende de la compañía.
Con un seguro, se garantizaría en caso de accidente la cobertura de gastos médicos e indemnización para las víctimas, ya que éstos correrían a cargo de las aseguradoras, evitando el desequilibrio económico de las familias.
Asimismo, la AMIS destacó que México es uno de los pocos países que no cuentan con esta medida de protección a las víctimas de accidentes, como lo tienen aquello s países miembros de la Unión Europea, la OCDE y el G20.
La obligatoriedad de un seguro vehicular, dice AMIS, también ayuda a las finanzas de los estados, debido a que las autoridades, con dinero de los contribuyentes, son los que aportan los recursos para cubrir los daños que generan los automovilistas.
En su mayoría el estado acaba pagando el monto que generan los accidentes de tránsito, debido que la mayoría de los automovilistas que no cuentan con seguro, “no tienen los recursos para hacer frente a los gastos que se generan por los siniestros y es por eso que se dan a la fuga”.
Según los estudios realizados, refirió AMIS, indican que en Querétaro se ubica en el noveno sitio a nivel nacional en cuanto accidentes de tránsito, sin embargo, únicamente están asegurados el 37% de los vehículos.