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Ante la probable participación de integrantes de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Querétaro en el robo de armas perpetrado en julio del año pasado, el presidente municipal, Enrique Correa Sada, aseguró que no se tolerará ningún acto de corrupción en el ayuntamiento, y serán implacables con el castigo de los responsables, señaló.
“Nosotros cooperaremos con la fiscalía para que se dé con los responsables, y no seremos tolerantes de ninguna falta y de ningún acto de corrupción por parte de ningún servidor público”, señaló el presidente municipal.
Fue la noche del martes 18 de julio de 2017 cuando, de un módulo de policía ubicado en el acceso 2 de la Zona Industrial Benito Juárez de la capital queretana, fueron sustraídas 34 armas cortas y 36 armas largas sin cargador.
Según los reportes de ese momento fueron entre tres y cinco sujetos los que irrumpieron en el inmueble. Inmediatamente las autoridades llamaron a 26 elementos de la Policía Municipal para iniciar con las investigaciones.
Durante la comparecencia del titular de Secretaría de Seguridad Ciudadana, Juan Marcos Granados Torres, ante diputados de la 58 Legislatura por las glosas del Tercer Informe del gobernador, se informó que el robo fue resuelto por la Fiscalía General del Estado de Querétaro (FGE).
El secretario Granados Torres indicó que como resultado de las investigaciones que llevó a cabo la FGE, se sabe que fue personal que tiene el control de armamento el que estuvo involucrado con el robo de las armas en 2017.
Ante esto, el alcalde Correa Sada explicó que el ayuntamiento cooperará con las autoridades para que lleve a cabo las investigaciones necesarias y dar con los responsables del robo de armas.
“Cualquier acto que no sea apegado a derecho, y que viole las normas, el municipio de Querétaro los sancionará, y seremos implacables en el seguimiento para que ningún servidor público esté por encima de la ley”, dijo.
bft
