El magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia, Carlos Septién Olivares, informó que el organismo decidió la rotación de 35 jueces en materia civil, penal y mercantil en el estado.
Sólo uno, en San Juan del Río, no aceptó la medida, diciendo que se le afectaba personalmente.
Explicó que producto de un consenso del Pleno del Consejo del Tribunal Superior de Justicia del estado, se resolvió la rotación de los 35 jueces, para eliminar posibles vicios en los encargados de administrar justicia en la entidad.
La resolución se tomó por decisión de 12 de los 13 magistrados en pleno, quienes consideraron que la medida es la forma idónea, para erradicar intereses personales que pudiesen surgir por las partes que llegan a conformar un juicio, los abogados, los litigantes y el mismo juzgador por el trato de forma constante en el mismo sitio.
“El cambio de adscripción no debe de considerarse como una sanción, por el contrario, como una práctica liberal progresista y necesaria para lograr un servicio basado en la eficacia, honestidad y transparencia”.
“Esto impide se generen intereses personales y malas prácticas, incluso atenúa de forma considerable el riesgo de que el titular del juzgado desarrolle su trabajo de forma mecánica y monótona”, explicó.
De los 35 jueces que deben de ser rotados en el estado dos no han tomado posesión de sus nuevas oficinas.
El juez segundo civil en San Juan del Río, Carlos Maya García, se inconformó de la rotación y acudió al juicio de amparo ante el juzgado primero de distrito cuya autoridad federal le concedió la suspensión provisional, por lo tanto este juez queda en su mismo lugar.