Un peculiar diseño, creatividad, procesos artesanales de elaboración y sustentabilidad se conjugan en diversos productos y artículos que jóvenes queretanos crean y venden en El Taller Imaginario.
Macetas, plantas, pulseras, bolsas, tenis y demás artículos se pueden encontrar en el establecimiento que se ubica en el Centro Histórico de Querétaro —entre las calles 5 de Mayo y Altamirano—, enlistó la promotora de El Taller Imaginario, Patricia Ávila Luna.
Como un proyecto a futuro, desde hace tres años se concretaba la idea de establecer un sitio donde la comercialización de artesanías urbanas fuera el principal demostrativo.
“La idea surgió hace mucho tiempo, yo creo que ya tengo como tres años trabajando en ella”, compartió la joven.
En el sitio se pueden encontrar tanto artesanías labradas por grupos indígenas como las creadas por jóvenes queretanos. Un involucramiento en actividades que promueven la economía solidaria fue el promotor de El Taller imaginario”, expresó Patricia Ávila.
“Me empecé a involucrar en el tema de la economía solidaria y a partir de ahí tuve un gusto personal por la artesanía y por las cosas hechas a mano”.
De tal motivación surgió la inquietud de la joven emprendedora para promover e instar la venta de artículos fabricados artesanalmente, a fin de suscitar el ocupamiento de oficios y la elaboración manual.
“Me interesó promover y rescatar todo lo que tiene que ver con los objetos hechos a mano; no solamente como la artesanía tradicional sino también la urbana, las cosas que se están haciendo en la ciudad, recuperar los oficios y que la gente vuelva a utilizar sus manos para producir cosas”.
El taller tiene dos meses de haber reinaugurado, sitio donde los caminantes o apreciadores de las artesanías pueden encontrar diseños peculiares en accesorios o artículos hechos a mano.
En el lugar se exhiben —para venta al público— productos y artefactos creados por artesanos tanto queretanos como de otras partes de la República Mexicana; además son mostrados en la página de internet www.tallerimaginario.com.
“Poco a poquito se han ido integrando más artesanos, estamos trabajando como un colectivo donde la gente que está interesada en promover su artesanía se inscribe y nosotros les ayudamos con la parte de la comercialización y un poco de consultoría, les ponemos el producto en la tienda en línea y en la tienda en físico”.
Diversidad de productos
Entre los artesanos externos están los de Olinalá, Guerrero, quienes elaboran cajas de madera: “hay artesanos de Guerrero, por ejemplo, esos productos de allá son pintados a mano o las cajitas de Olinalá, Guerrero, tiene denominación de origen, están hechas a mano con una madera especial que se llama lináloe”, explicó Patricia.
También se promocionan fundas para laptops que son elaboradas por un grupo de habitantes de Amealco. “De Querétaro hay unas fundas para laptop que están diseñadas por unas chicas de aquí, pero toda la funda y el bordado lo hacen en Amealco. Son una cooperativa de mujeres (de Amealco)”.
Además, prendas como playeras y suéteres son creadas por una diseñadora queretana; “hay productos hechos por una diseñadora queretana que se llama Johana Batista, son playeras de algodón”, comentó Ávila Luna.
Igualmente se exponen tenis bordados por el grupo indígena integrado por guirráricas: “están los tenis bordados por guirráricas, por unos huicholes, de la comunidad de la Cebolleta, en Jalisco, ese es un proyecto productivo de una antropóloga de la Ciudad de México”.
Promover los productos hechos manualmente es uno de los estímulos de El Taller Imaginario; ya que se imparten talleres y se apoya la realización de proyectos en favor de comunidades.
“Y además se ayuda a los productores, para los artesanos que bordan los tenis se hace un fondo para generar capacitación y producción de diversas enotecnias, sobre todo para captura y almacenamiento de agua pluvial, por la onda de la sequía”.