Los comerciantes establecidos del Centro Histórico de la capital pidieron a las autoridades municipales controlar el crecimiento de los ambulantes con y sin licencia, ya que los locatarios se encuentran en desventaja debido a que ellos, dijeron, sí pagan servicios, renta y licencias de funcionamiento.
Según un censo, en la capital hay 17 mil 700 comerciantes ambulantes, de los cuales 13 mil 700 cuentan con licencia para este tipo de actividad y 4 mil 700 son informales.
José María Martínez, comerciante establecido de artesanías, señaló que los ambulantes en el centro de la ciudad siempre han sido un problema que repercute en las ventas de los locatarios, debido a que los ambulantes pueden bajar los precios de los productos, ya que ellos no pagan agua, luz, renta ni licencias.
“No es que a nosotros nos guste dar caras las cosas, pero nosotros sí tenemos que pagar agua, luz, renta y además pagar impuestos, no es justo que ellos no paguen nada y vendan. Siempre ha sido lo mismo, nos hemos acercado con las autoridades y las cosas no cambian”, lamentó José María Martínez.
Añadió que como vendedor de artesanías tienen convenio con indígenas que elaboran muñecas, no obstante, explicó que como vendedor establecido siempre sale perdiendo, pues para obtener ganancia le tiene que subir el precio, mientras que los artesanos las ofrecen más baratas en las plazas principales.
“Yo no quiero que estas personas se queden sin una fuente de ingresos, pero tampoco es justo que nosotros no tengamos ganancias por los ambulantes; es necesario que se haga algo para que nadie salga perdiendo”, dijo.
Cabe destacar que actualmente el municipio de Querétaro trabaja en un plan para controlar el ambulantaje, el cual pretende sectorizar el comercio dedicado al turismo y de uso común, ubicando el primero en las plazas del Centro Histórico y el segundo en mercados, tianguis y paradas de autobuses.
Por su parte, Marcos Peña, vendedor de artículos de mujer, también mostró su descontento con los ambulantes, pues dijo que no solo se tienen que enfrentar a todas las personas que venden en avenida Zaragoza artículos para dama, sino que ahora las ambulantes indígenas han optado por vender pulseras, anillos y diademas.