Luego de que entrara en vigor la reforma en telecomunicaciones, que prohíbe transmitir publicidad de comida chatarra en horario infantil en televisión y cine, el diputado local de la Comisión de Salud y Población, Enrique Correa Sada, dijo que la medida no terminará con los índices de obesidad, y responsabilizó a los padres de familia de propiciar la mala alimentación en los menores.
Aunque reconoció que esta propuesta aporta en la disminución de obesidad, dijo que los padres de familia son uno de los sectores donde se debe llevar la concientización.
“A mí me parece una medida importante que celebro que se dé; sin embargo, quien toma la decisión de cómo se alimentan los menores son los padres, a donde tenemos que atacar es en la conciencia de los padres para mejorar la alimentación, propiciar una dieta balanceada, que sea rica en nutrimentos y que permita desarrollo pleno de los jóvenes”, opinó.
La finalidad de la reforma es atender el sobrepeso, obesidad y diabetes con la menor exposición de alimentos de bajo valor nutrimental para los niños.
La reforma restringe los comerciales de comida chatarra de las 2:30 de la tarde a las 19:30 horas de lunes a viernes.
Correa Sada destacó que el estado se ubica en la media nacional en obesidad, es decir, siete de cada 10 niños tienen sobrepeso.