El abogado Joaquín Xamán McGregor, representante de Alberto “N” y Daniel “N”, cuyas identidades están protegidas, denunció que sus clientes están siendo acosados y seguidos en sus domicilios particulares y laborales, quienes presumen que este hostigamiento podría provenir de las autoridades federales; el empresario queretano, Manuel Barreiro Castañeda, o el ahora candidato presidencial de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya.
En conferencia de prensa, Joaquín Xamán, explicó que Alberto “N” y Daniel “N”, fueron contratados entre el 2016 y 2017 por Manuel Barreiro para triangular recursos, y no se supiera de dónde provenían los recursos con los que se adquirió la nave industrial de la empresa Juniserra, propiedad de Anaya y su familia política, en casi 54 millones de pesos, en agosto de 2016.
Joaquín Xamán McGregor, dijo que sus clientes acudieron a la PGR a declarar y a conocer su situación jurídica y a raíz de eso notaron el acoso y el hostigamiento.
“Es la única manera de garantizar la integridad de mis clientes aquí presentes, derivado de los hechos que serán mencionados, mis clientes comenzaron a detectar que los seguían en vehículos desconocidos y que éstos mantenían una vigilancia en torno a sus domicilios particulares y laborales, e incluso sus domicilios han sido cateados, temerosos por su integridad es que se acercaron a un servidor buscando asistencia jurídica, una vez que nos percatamos, a través de ellos medios de comunicación de la dimensión política que envolvía el caso del que hoy les hablaremos, es que les recomendé acudir a la PGR para aclarar su situación”, dijo Xamán McGregor.
“El acoso contra mis clientes no ha cesado razón por la que hemos decidido salir ante la opinión pública porque no sabemos quién está detrás de este acoso, la autoridad federal, el gobierno de Querétaro, o bien, la persona que contrató a mis clientes para hacer el entramado financiero, y por tanto, hacemos responsables tanto a la PGR, al señor Manuel Barreiro Castañeda y Ricardo Anaya Cortés de cualquier afectación que pudieran sufrir en lo futuro”, agregó.
Relató que entre los años 2016 y 2017, sus clientes Alberto “N” y Daniel “N”, cuyas identidades están protegidas por ley, fueron contratados por el señor Manuel Barreriro Castañeda, empresario originario de Querétaro para realizar una serie de triangulaciones financieras, que según dijo a mis clientes, tenían como finalidad hacer llegar recursos económicos a Ricardo Anaya Cortés, mediante un esquema que le permitiera ocultar el origen de los mismos, simulando, para ello, una supuesta venta de una nave industrial.
“Mis clientes no tuvieron contacto directo con Ricardo Anaya, su cliente Manuel Barreiro, fue quien los contrató y les explicó el origen y destino de los fondos”, explicó.