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Marco Carrillo, candidato del Partido del Trabajo (PT) a la alcaldía de Querétaro, visitó la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) donde fue recibido por el rector de esta casa de estudios, Gilberto Herrera, quien deseó suerte al abanderado petista que además es docente en la institución.
En las oficinas de Rectoría, el abanderado del PT fue recibido por el rector Herrera Ruiz, quien le expresó su apoyo y reconoció en él a unos de los mejores investigadores que tiene la UAQ, pues forma parte del Sistema Nacional de Investigadores.
“Estamos orgullosos de la candidatura de un profesor nuestro, que me consta siempre ha sido un excelente profesor, siempre ha sido de los mejores evaluados por los alumnos, miembro del Sistema Nacional de Investigadores, que pocos profesores nuestros lo tienen, entonces estamos muy orgullosos de la candidatura”, refirió.
La propuesta que presentó el candidato Carillo consistió en dos puntos: dotar a la UAQ de una partida presupuestal desde el municipio, para que la universidad los pueda destinar en los proyectos o necesidades que tenga.
y convertir el sistema de becas en el programa de salario estudiantil, para que los universitarios tengan un apoyo económico que les permita cubrir sus necesidades primordiales.
“El programa de salario estudiantil es para garantizar al estudiante universitario una cantidad económica suficiente para cubrir los costos de alimentación, transporte y material didáctico. Esta es una iniciativa que tiene el PT a nivel nacional que la viene impulsando, que se enmarca en el gran proyecto educativo que tiene el partido”.
Gilberto Herrera destacó que es la primera propuesta que les hace llegar un candidato a la alcaldía a los universitarios.
Tras el encuentro, en donde estuvo la delegada nacional del PT, Gabriela Moreno, Marco Carrillo visitó las facultades de Psicología, donde él es docente, y la de Bellas Artes.
En entrevista, Marco Carrillo señaló que el tema de la juventud es una prioridad, y muestra de ello es el programa 18-28, dirigido a jóvenes cuyas edades fluctúan entre los 18 y los 28 años.
“Los estamos manejando en tres grandes líneas, la primera tiene que ver con lo que el municipio hace, el municipio es un gran empleador, pero lo que ha pasado por cuestiones económicas, pero no cumple con el trabajo digno, tiene que haber un proyecto de regularización y que los estudiantes que ingresen a la administración pública lo hagan en esas condiciones”.
La segunda, continuó, es el desarrollo de convenios con las empresas, para que puedan contratar a jóvenes preparados y capacitados, rompiendo ese vicio de llevarse a los alumnos de servicio social y prácticas profesionales.
La tercera sería la del desarrollo del emprendurismo, donde puedan contar con un apoyo económico.
