Tras 50 días de trabajo en la campaña política que definirá los destinos de todo el estado por al menos los próximos seis años, el candidato a la gubernatura Roberto Loyola ha comenzado a realizar el cierre de actividades, reiterando sus compromisos con la ciudadanía al tiempo en el que ajusta los detalles para que los municipios emitan su voto a favor del PRI.
En este quincuagésimo día de labores, el aspirante a la gubernatura se condujo por los municipios de Huimilpan y Amealco, empezando su último recorrido como candidato en la zona sur del estado, en una gira que dijo desea que pueda llegar a todos los municipios, que a su vez será en todas las delegaciones y comunidades, será representada por los candidatos a presidentes municipales.
Enlistando cada uno de los compromisos que se estarán cumpliendo en el municipio, una vez que resulte ganador, es la manera en la que arrancó su presentación en Huimilpan, donde dijo, estará respaldando a la presidenta municipal.
En un pequeño salón abarrotado con cientos de personas armados con banderas y entusiasmo, en la comunidad de Lagunillas, el candidato hizo su arribo y recibió los aplausos, gritos y porras de los huimilpenses, quienes escucharon atentos cada una de las palabras que el candidato exclamaba para comprometerse en trabajar para ellos, los que atendían al llamado de Loyola Vera.
Afuera, en un gran jardín con juegos y pastó verde, cientos de pequeños niños se encontraban demostrando su energía, corriendo, gritando y jugando; situación a la que se dirigió el candidato, cuando señaló que habrá de trabajar por ellos, para que sigan teniendo más espacios de recreación, en los que los ciudadanos de todas las edades puedan hacer comunidad.
Al afirmar que dejará de lado las viejas prácticas de políticos, en las que los candidatos “vienen, piden y nunca vuelven”, se comprometió a regresar todas las veces que sea necesario, hasta que las condiciones de vida se hayan mejorado; situación que fue celebrada por los presentes, quienes agitaron sus banderas y con aplausos detonaron que el candidato elevara la voz, para enmarcar la fuerza de su compromiso.