El presidente municipal de Cadereyta de Montes, Rodrigo Mejía Hernández, expuso que ya iniciaron los acercamientos con la nueva administración que encabezará León Enrique Bolaño, ganador de la contienda electoral del pasado 7 de junio.
“Espero que esta misma semana nos reunamos para ver los mecanismos que vamos a utilizar para la entrega-recepción. La intención de nosotros es hacerla de la forma más transparente y que esté enterado el nuevo presidente de la situación económica, así como de los problemas a los que se va a enfrentar”.
Expuso que cuando inició su administración, la deuda del municipio sumaba 42 millones de pesos, y a la fecha la deuda que dejará al próximo gobierno será de aproximadamente 37 millones de pesos. Argumenta que el problema de endeudamiento del municipio no es de la actual administración, ni de la pasada, sino que es un problema que se arrastra desde hace muchos años y eso, de acuerdo con el edil, se debe a la fórmula de repartición de recursos federales.
“El problemas es que nosotros creemos que se tiene que hacer una revisión de la fórmula de las reparticiones federales, porque nuestro municipio es el más extenso del estado, tenemos 243 comunidades, 55% de la población está en marginación alta y muy alta. El 90% de las comunidades están en esa condición y recibimos un recurso muy bajo”.
Explicó que los recursos que tradicionalmente recibe la demarcación no son acordes con las necesidades y extensión de la región.
Precisó que Cadereyta de Montes recibe al año dos mil 900 pesos per cápita; mientras que San Joaquín, al ser un municipio más pequeño, recibe siete mil 200 pesos per cápita y Peñamiller recibe cinco mil pesos.
“Si la siguiente administración quiere resolver el tema, tenemos que tocar puertas a nivel federal para revisar esas fórmulas, ya que no reflejan la realidad de nuestro municipio”.
Aseveró que son temas que se tienen que resolver de fondo para que realmente cambien las condiciones del municipio. “Tenemos una comunidad que está a tres horas de la cabecera municipal, imagínate cuánto nos cuesta llevar los servicios o por lo menos traer la basura desde allá”.
Manifestó además que los temas más urgentes a resolver por ésta y la próxima administración tiene que ver con pagos pendientes a personal sindicalizado del municipio, así como a proveedores.
“Nosotros pudimos solventarlo a lo largo de la administración porque podíamos hacer adelantos de participaciones sin problemas, pues teníamos tiempo para poder prorratear, pagar y cubrir ese recurso. Ahora, al final de la administración, evidentemente eso se complica, porque ya tenemos menos tiempo para poder hacer ese prorrateo”, explicó.
Resaltó que mantendrá reuniones con el sindicato y con el gobierno del estado para buscarle una solución a esa situación, ya que se tiene que subsanar un aproximado de dos millones 875 mil pesos con 256 trabajadores sindicalizados en temas de créditos y prestaciones.
“El sindicato está en la mejor disposición para trabajar, no estamos peleados, ni es nada personal, es una situación que tenemos que resolver juntos, y ellos están en la misma condición”..
Finalmente, aseguró que a pesar de la difícil situación económica que vive el municipio, sí se va a organizar la feria, aunque de manera modesta, ya que hay mucha gente que vive de este evento, como taxistas, hoteleros, transportistas, estacionamientos, restauranteros, entre otros sectores.
“Creemos que esa derrama económica ya se convirtió en parte importante de esa gente y la esperan con ansiedad cada año”.