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Con un llamado a votar “parejo” por los candidatos de Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador realizó su cierre de campaña en Querétaro, acompañado de todos los candidatos locales, donde ofreció construir en la tierra el reino de la justicia.
El candidato a la Presidencia de la República por los partidos Morena, Encuentro Social (PES) y del Trabajo (PT) adelantó que la próxima vez que visite a Querétaro, lo hará como presidente electo, porque presentará un programa de desarrollo integral que incluirá actividades productivas que generarán creación de empleos e infraestructura social.
Asimismo, frente a unos cinco mil simpatizantes que se dieron cita en el jardín Guerrero de la capital queretana, afirmó que tiene la “legítima ambición de pasar a a historia como el mejor presidente de México”.
“No les voy a decepcionar, no voy a traicionar la confianza que han depositado en mí millones de mexicanos. Vamos a hacer historia entre todos. Vamos a llevar a cabo la transformación que requiere el país”, aseveró, al tiempo que reiteró que esta cuarta transformación del país será sin violencia.
Asimismo, mandó un mensaje a Carlos Salinas de Gortari y a Diego Fernández de Cevallos, de quienes dijo están muy activos tratando de unir al PRI y al PAN para enfrentarlos y alientan la guerra sucia.
“Les digo que se serenen, que se tranquilicen, no le vamos a hacer daño a nadie. Queremos que se termine con la corrupción, el influyentismo, no es mi fuerte la venganza. No tengo enemigos, ni quiero tenerlos, tengo adversarios y siempre van a ser respetados, nadie se va a ir del país”, subrayó.
Volvió a i nsistir que el principal problema del país es la corrupción y que tienen como principal objetivo erradicarla. “Voy a terminar con la corrupción en el país, me canso ganso, voy a acabar con la robadera”.
Imagen del país
Apuntó que si ahora se conoce a México por ser un país con altos índices de corrupción, en su gobierno tratará de enmendar ese problema y hacer de la nación un lugar donde este flagelo haya desaparecido.
Asimismo, subrayó que no habrá divorcio entre pueblo y mandatarios, pues el suyo será un gobierno del pueblo y con el pueblo, por lo que cada seis meses evaluará los programas y el desempeño de la administración.
De la misma manera, propuso terminar con el rezago en el campo, ofreciendo apoyos y precios de garantía a los productos del campo, para así también terminar con la importación de granos, como el maíz.
Asimismo, ratificó que dará apoyo económico a jóvenes estudiantes, duplicará el que reciben los adultos mayores, y que no habrá joven en el país que no tenga la oportunidad de cursar una carrera universitaria.
Agregó que durante todo su sexenio no se aumentarán los impuestos, no habrá aumento a los combustibles, y que venderá la flotilla de aviones que pertenecen al gobierno.
En su gobierno, añadió, los funcionarios, comenzando por él, se bajarán el sueldo a la mitad, mientras que a los burócratas se les aumentará, al tiempo que desmintió que vaya a desaparecer a la Secretaría de la Defensa Nacional.
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